«En el Tour hemos salido 12-14 ciclistas vascos y eso ya no va a pasar»

El ciclismo vasco vive momentos extraños. Sigue siendo una referencia a nivel mundial, pero mientras la afición llena las carreteras y siguen saliendo corredores, el propio deporte cambia a pasos tan grandes que muchas veces cuesta ser consciente. NAIZ se da cita con una voz autorizada como la de David Etxeberria para repasar la realidad de un ciclismo que busca mantener su espacio en medio de un entorno cambiante. 

¿Qué tal este primer año como seleccionador de Euskadi sub-23?

Muy contento, porque, al final, yo fui campeón de España amateur. Cuando acepté ser seleccionador, intentar que un corredor vasco fuera campeón de España conmigo como director era un reto. Yo le dije al presidente de la federación que quería que en dos años se consiguiera y se ha conseguido el primer año. Pero también te das cuenta de que el ciclismo vasco está yendo hacia atrás. Cuando yo corría éramos dominadores en el Estado español y a día de hoy no es así. Hay cuatro autonomías que sacan nueve corredores. Nosotros no podemos salir con nueve, salimos con ocho.

Pues yo venía pensando en que la entrevista no quedara muy pesimista...

Pero es así. Hay que tenerlo claro. El ciclismo vasco ha dado un paso hacia atrás. Tenemos una cosa muy buena, que no tiene nadie: el calendario. En Euskadi está el mejor calendario de todo el ciclismo amateur, con diferencia. Tienes carreras cada fin de semana, vueltas internacionales, carreras de un día, las Copas de España más importantes se hacen en Euskadi... Pero nos estamos quedando sin corredores.

¿Y a qué cree que se debe?

Está habiendo un cambio, pero no es de ahora. Viene ya de los últimos seis, siete años. El ciclismo se ha globalizado mucho. Si analizas los italianos que había antes y los que hay ahora, también son menos. En España está Movistar y los equipos pequeños subsisten si van a la Vuelta. Si no van a la Vuelta casi están condenados a desaparecer. Todo eso está haciendo que el músculo sea menor. Y al haber menos músculo, hay menos corredores.

El World Tour también está haciendo crecer esa brecha.

Lo que ha hecho el World Tour es crear una élite, como la Fórmula 1 o la NBA. Y la idea era esa. El nivel económico es muchísimo más alto. El corredor que esté 10 años en el World Tour probablemente pueda retirarse y vivir de las rentas. Está creando una brecha y el salto es muy grande. Lo que estoy viendo yo es que los chavales de abajo se están dando cuenta de que o pasan al World Tour o no les compensa.

«Lo que estoy viendo yo es que los chavales de abajo se están dando cuenta de que o pasan al World Tour o no les compensa»

Esa brecha está ocurriendo también en el ciclismo italiano o el belga.

El italiano está muy parecido al español. El francés es el ciclismo que se está adaptando mejor, incluso sin estar dentro del World Tour. No sé qué leyes de patrocinio tienen, pero es esencial para que haya mejores equipos. Al resto de países europeos, de lo que se llama el viejo ciclismo, les está costando mucho más.

¿A qué se debe esa mala adaptación?

Porque la estructura tiene que ser muy potente. En estos momentos, en Italia ¿cuántos sponsors hay con capacidad de poner 10, 12, 15 millones? Hay muy pocos. Y en España pasa lo mismo.

Pero, si aquí hay un buen calendario de carreras, ¿cuál cree que es el problema?

Que los equipos amateur deberían empezar a correr el calendario europeo. Porque estás corriendo el calendario euskaldun, con gente que, en muchos casos, son cicloturistas. Es así. Y eso que ha mejorado. Cuando empecé como director había carreras que salían 60 corredores y ahora estamos saliendo 180. Pero de esos, hay 50 o 60 que son cicloturistas.

¿Cuál es el problema de eso?

El presupuesto. Solo en viajes, el calendario europeo implica un coste muchísimo mayor y económicamente, hay muy pocos equipos que puedan costear ese gasto.

A nivel de afición, me refiero a chavales que quieran andar en bici, no hay problema.

A ver, ha cambiado. Pero no ha cambiado solo en España. Ha cambiado en toda Europa. Ha cambiado la sociedad. El ciclismo es un deporte de sacrificios. Yo soy director desde 2010 y en 15 años he notado el cambio de los chavales. No es que se sacrifiquen menos, es que entienden que el sacrificio que tienen que hacer no les compensa, porque no saben si van a llegar al WorldTour. Antes el objetivo era llegar a profesionales. Ahora es a ver si llego al WorldTour. Tienen un paso más.

¿Hay suficientes corredores?

Sí, hay un pelotón muy amplio. Eso sí que ha mejorado en los últimos 5 o 6 años. Pero cuando llega el momento de hacer los sacrificios que hay que hacer, hay gente que no le compensa. Antes compensaba porque veíamos más fácil llegar a ser profesional. Ahora pasas a Euskaltel o Caja Rural y todavía tienes un paso más.

«Todos los equipos World Tour van a tener equipos de evolución (Evo). Eso va a hacer que haya que dar un tercer paso. Del amateur a Evo, Continental-Pro y World Tour»

¿Cree que se están creando unas estructuras muy profesionalizadas en el World Tour, mientras que en amateur no se produce el mismo desarrollo?

En amateur se está mejorando mucho. Cada equipo está mejorando. Por ejemplo, si yo comparo la estructura que tenemos ahora a lo que teníamos hace 10 años, no tiene nada que ver. Pero sí que es verdad que todavía tiene que mejorar mucho. Y ahora estamos viendo el siguiente paso que va a venir, que es que todos los equipos World Tour van a tener equipos de evolución (Evo). Eso va a hacer que haya que dar un tercer paso. Del amateur a Evo, Continental-Pro y World Tour.

Pero también puede acercar el camino, porque serían como los filiales en el fútbol.

Yo creo que los equipos, sobre todo Conti-Pro, si no tuvieran un equipo amateur, tendrían más posibilidades de fichar mejores corredores, porque ellos siempre fichan de su cantera. Por ejemplo, ahora Caja Rural está dominando el calendario Euskaldun. Pero sus corredores no están mejorando tanto, porque, aunque son muy buenos, corren entre ellos. Si no tuvieran filiales, no estarían todos los buenos en un mismo equipo y lucharían entre ellos. Mejoraría la competencia y de ahí sale un corredor mejor.

Tengo la sensación de que el ciclismo ha cambiado mucho, pero va a cambiar mucho más en los próximos años.

Va a cambiar el tema de los Evos, pero también hay cambios que ya estamos viviendo. Tú ahora vas a por un corredor juvenil, en Euskadi, no en España y no quiere pasar a amateur, quiere saltar directamente a profesionales. Y no todos tienen el nivel para pasar a profesionales. Yo creo que ha habido un boom en 3 ó 4 años de pasar muchos a profesionales y de ahí van a volver unos cuantos. Una vez que estén los Evos el filtro va a ser más real.

¿A día de hoy es viable que pueda existir un equipo World Tour como fue Euskaltel?

No, eso ahora no se puede dar. Porque antes un presupuesto de Euskaltel eran 7 millones de euros. Y ahora, te vas a 20 ó 22 que tiene Movistar y estás con el agua al cuello. Yo sé que ha habido un movimiento, por parte de la Federación Vasca sobre todo. La idea era sacar un equipo que sea como un Evo de la Federación Vasca. Esa sí es una buena idea.

«Antes un presupuesto de Euskaltel eran 7 millones de euros. Y ahora, te vas a 20 ó 22 que tiene Movistar y estás con el agua al cuello»

Con la situación actual, ¿cree que es más difícil que lleguen ciclistas vascos al World Tour?

Pero porque está habiendo menos corredores profesionales. Yo entiendo que Euskadi tiene mucha afición, con lo cual van a salir ciclistas. Pero no van a ser los 15 que había antes, porque eso ha cambiado en todo. No solo en Euskadi, ha cambiado en España, ha cambiado en Italia y ha cambiado en Francia. Lo que hay que buscar es que, esos que pasan a profesionales, intenten llegar al World Tour. Porque ahora sí tenemos corredores en el World Tour. Arrieta, Barrenetxea o Lazkano van a ser profesionales 10 años. Pero va a haber 2, 3, 4. Si conseguimos que esos que lleguen sean buenos, ya lo ves de otra manera.

O sea, adaptar el ciclismo vasco a la realidad súper profesionalizada del WorldTour.

Claro. Ahí sí que yo veo que existe la posibilidad de sacar un equipo Evo. Porque ahí entendería que entrara el dinero público. Aunque no debería ser el sostén de ese equipo. Porque estás ayudando al Evo, pero a la vez estás ayudando más abajo. En cambio ahora, yo no veo eso en los equipos Conti-Pro.

¿Cree que en el ciclismo femenino está ocurriendo lo mismo?

El ciclismo femenino tampoco lo controlo mucho, pero creo que se está apoyando mucho y bien. Porque, para que un deporte femenino crezca, la única manera que existe es meter mucho dinero. ¿Qué es lo que está pasando a día de hoy? Que hay dinero, pero no hay de dónde coger corredoras. No hay estructura abajo. Yo creo que, si mantienes lo que estás haciendo ahora, dentro de 10 años probablemente veamos un equipo con todo ciclistas de Euskadi. Eso puede pasar, pero a día de hoy no está pasando.

¿No está creciendo el número de ciclistas mujeres?

Está creciendo, pero viene de abajo, muy abajo. A día de hoy está el Laboral y luego no hay estructura abajo que sostenga eso, porque no hay corredoras.

¿Dentro de unos años Laboral-Kutxa puede ser lo que fue en su día Euskaltel?

Yo veo que sí se puede. Creo que se está haciendo bien, en el sentido de que las instituciones están apoyando el ciclismo femenino de base. Pero no hay que dejarlo de hacerlo. Porque a día de hoy no se están viendo los resultados, pero es normal que no se vean. Necesitas diez años, para que lo de abajo vaya para arriba.

¿Cree que el World Tour Femenino va a seguir el mismo camino del masculino?

Ya está siguiendo. Lo que no sé es si va a haber capacidad para que soporte quince equipos World Tour. Creo que se debería ir a menos. Laboral está metiendo mucho dinero. ¿Cuántos equipos pueden hacer eso a día de hoy? Es la duda que tengo yo. Aunque no sé bien cómo está.

«A día de hoy está el Laboral y luego no hay estructura abajo que sostenga eso, porque no hay corredoras»

Pero eso no está ocurriendo sólo en Euskal Herria.

Ocurre en todos los lados. Se está metiendo dinero en el deporte femenino porque toda la sociedad quiere que crezca. El mundo amateur está como está porque en todo el mundo el World Tour les ha pasado por encima. Han llegado con pasta y te están quitando los corredores. Nos han pasado por encima, entonces hay que empezar de nuevo.

¿Qué influencia cree que ha tenido en este proceso la entrada del dinero de países árabes?

Mucha. Porque en UAE hay corredores que están ganando mucho dinero. Lo que Movistar está pagando a Enric Mas, ellos se lo pagan a 10 tíos. ¿Qué ha hecho eso? Que Visma se vea obligado a contratar otro sponsor. Que Ineos haya tenido que coger a Total Energies. Todos los presupuestos han subido porque ha entrado el dinero de allí. Lo que han hecho es lo mismo que nos va a pasar con la IA. Nos va a pasar por encima. También te digo que creo que en dos, tres años, se va a equilibrar todo. Porque van a sacar los Evo y van a coger uno, dos, tres corredores, pero el resto se van a tener que acomodar en aficionados.

¿La UCI está controlando esa evolución?

No. Creo que no.

¿Y no cree que debería controlarlo?

Sí. Ahora, al tener tantos datos, es más fácil saber quién es bueno. El talento está, pero con 17 años la cabeza no. Y la presión que tienes es muy grande. Hay corredores que, con 19 años, 20 años, en profesionales, lo están dejando. Están llegando arriba, están viendo la presión que hay, pero de cabeza no están hechos.

Un Markel Beloki o un Igor Arrieta, que no son estrellas, ¿tienen esa presión?

La tienen. Seguro. Lo que pasa es que han sabido adaptarse. Pero hay otros que no.

¿El futuro del ciclismo vasco está asegurado?

El futuro está asegurado. Lo que no vamos a volver a ver es tantos ciclistas ahí arriba. Que van a salir buenos es seguro, pero en vez de tener 10, vas a tener 3. Lo que hay que empezar a normalizar es eso. Es que en el Tour hemos salido 12, 14 vascos y eso ya no va a pasar. Pero la estructura es bastante buena. Lo que pasa es que nos han sacudido el árbol y lo que hay que hacer es reaccionar. Quiero remarcar que no es que nosotros estemos haciendo mal las cosas, es que los cambios en el ciclismo nos han pasado por encima a todos.