El rifirrafe entre PNV y PSE salta al Gobierno con polémica entre Zupiria y Torres
El choque que escenifican PNV y PSE ha saltado al Consejo de Gobierno. Bingen Zupiria ha dicho que las declaraciones de Eneko Andueza crean «una situación más incómoda» para los consejeros de su partido, y el vicelehendakari Mikel Torres le ha respondido que sus palabras son «dolorosas».
El rifirrafe que estos días están escenificando PNV y PSE ha dado un salto cualitativo este miércoles y ha llegado al propio Gobierno, con unas palabras del consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, en una entrevista radiofónica, que el vicelehendakari Mikel Torres ha calificado de «dolorosas».
Entrevistado en Euskadi Irratia, el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha dicho que «los deberes» que «a veces» pone al Ejecutivo autonómico el secretario general del PSE, Eneko Andueza, crean «una situación más incomoda» para los consejeros de su partido que para los del PNV. Ha recordado que ni el lehendakari ni ninguno de los consejeros jeltzales tienen cargos dentro de su partido, pero algunos de los representantes del PSE, sí. Mikel Torres es secretario general del PSE de Bizkaia y Javier Hurtado, de Araba. Denis Itxaso y Susana García forman parte de la Comisión Ejecutiva.
Por ello, Zupiria cree que su situación no tiene que ser cómoda, puesto que «por un lado, deben defender los programas de gobierno que tenemos acordados por los dos partidos y su actividad está ligada a eso, al igual que la nuestra. Pero, por otro lado, ellos tienen fuera un secretario general que, a veces, les pone y nos pone deberes, y pienso que seguramente eso crea una situación más incómoda para ellos que para nosotros».
Dura réplica de Mikel Torres
El vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres le ha respondido a través de sus redes sociales afirmando que «el Partido Socialista tiene un Secretario General y unos órganos de dirección que trabajan todos en la misma dirección y con el mismo criterio y objetivo político. No experimentamos, por tanto, ninguna incomodidad cuando nuestro Secretario General, Eneko Andueza, traslada una posición política sobre cualquier asunto».
Explica que «yo mismo, como vicelehendakari y mis compañeros y compañeras socialistas en el Consejo de Gobierno, sí nos sentimos incómodos cuando parece que se pretende negar al PSE su capacidad para tomar decisiones manifestar un criterio propio, defender consensos alcanzados hace no tanto o, simplemente, disentir».
El vicelehendakari y secretario general del PSE asegura que el hecho de que «nuestro socio de gobierno, el PNV, trate de perjudicar la imagen de nuestro secretario general nos resulta doloroso, por injusto, pero que esas voces procedan, precisamente, del propio Consejo de Gobierno, no es de recibo. No es la primera vez que se pretende sugerir algo así, pero resulta evidente que el consejero Bingen Zupiria no ha estado acertado en sus declaraciones de hoy».
Mikel Torres ha escrito que «el lehendakari Pradales ha acotado a la perfección esta mañana las prioridades respecto a la estabilidad y el trabajo en común de los dos partidos. Existe un buen clima de trabajo en el Gobierno Vasco y una buena relación entre los miembros de los dos partidos (de ambas cosas puedo dar fe). La coalición arroja resultados que siempre hemos valorado positivamente, pero esto no es incompatible con denunciar el abuso que se pretende con los cambios sobre las exigencias del euskera en la administración. Y, en eso, coincidimos todos los cargos orgánicos e institucionales socialistas».
El lehendakari prioriza los acuerdos
En un acto matinal en Madrid, Imanol Pradales, había realizado un llamamiento a blindar la estabilidad que ofrece en la CAV el Gobierno de coalición PNV-PSE frente a «intereses políticos de terceros» que quieren «debilitar la alianza». Cabe recordar que en este rifirrafe se han metido los socios ellos solos, sin necesidad de que nadie los alentase desde fuera.
Pradales ha añadido que «a mí me parece que es muchísimo más lo que hoy nos une, que las posiciones que cada uno de los partidos que conformamos la coalición de gobierno podamos tener en determinadas materias», incluso, «se puede acordar y pactar el disenso en algunas materias y no pasa nada».
Rifirrafe entre socios
Este nuevo choque entre los socios en los gobiernos todas las grandes instituciones de la CAV se produce después de que PNV y PSE se enfrentaran el pasado jueves en el Parlamento por la búsqueda de blindar el conocimiento del euskara en la Función Pública, que dio lugar a graves acusaciones del PSE contra los jeltzales, tanto dentro de la Cámara como fuera después en declaraciones públicas.
El secretario general del PSE, Eneko Andueza, extendió después las discrepancias a lo relativo al nuevo estatus y a la migración. El todavía alcalde de Donostia, Eneko Goia, lo tachó de «charlatán», por lo que Andueza pidió al lehendakari Imanol Pradales que le llamara la atención, a lo que añadía que el edil «no puede tapar su mala gestión a base de insultos».
Mientras tanto, el presidente del EBB, Aitor Esteban, afirmaba «son las declaraciones de Eneko Andueza, innecesarias y absolutamente fuera de lugar, las que generan tensión, fricción y desconfianza».
Este miércoles, Eneko Goia ha replicado a Eneko Andueza que las críticas a la «mala» gestión del regidor donostiarra «ofenden también» a su «socio de gobierno», el PSE, que es «corresponsable de lo bueno y lo malo» que se haya hecho.
Otegi: El PSE utiliza su «poder» sobre el PNV
También al secretario general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, le han preguntado en NAIZ Irratia sobre las palabras de Eneko Andueza criticando al PNV, y este ha roto el hielo bromeando con que el secretario general del PSE «es de Eibar, y siendo yo de Elgoibar, conozco muy bien a los eibarreses». Ha añadido que «es su estilo».
Después, ya en serio, ha afirmado que «hay una cosa que nadie debe olvidar, el PSE tiene 12 parlamentarios de 75, pero el PNV se apoya en ellos y no solo en el Gobierno de Lakua sino en otras numerosas instituciones y en algunas con el apoyo del PP. Eso le da al PSE un poder, entre comillas, frente al PNV y lo utiliza».
Nuevo encontronazo parlamentario
Los socios de gobierno PNV y PSE vuelven a tener un encontronazo por el centro de acogida de refugiados de Arana en Gasteiz. En una enmienda, los jeltzales lo rechazan y piden su paralización, mientras que el PSE la apoya.
En cuanto el PP active y lleve a pleno su proposición no de ley en contra del Centro Internacional de Acogida de Refugiados previsto en la Clínica Arana, PNV y PSE escenificarán sus posiciones diametralmente opuestas sobre esta materia. Este miércoles se cerraba el plazo para la presentación de enmiendas y los socios de gobierno han presentado sus textos por separado y con contenidos absolutamente contrapuestos.
El texto del PNV dice que «el Parlamento Vasco rechaza y solicita la paralización del proyecto de macrocentro de personas refugiadas de Arana por ser un modelo insostenible, inadecuado y contrario al modelo vasco de acogida que apuesta por centros más pequeños que ofrecen una acogida y atención más personalizadas».
El del PSE, más complejo, apoya la iniciativa del Gobierno español, definida como «proyecto para hacer frente al aumento de personas refugiadas por el incremento de los conflictos bélicos», pide que las instituciones colaboren para adecuar su tamaño y explicarlo bien a la ciudadanía.
La proposición no de ley del PP, además de rechazar el centro, pide a los gobiernos español y de Lakua «acordar y planificar la dedicación de ese edificio a otros fines sociales que den respuesta a las necesidades de nuestro territorio».
Entre tanto, EH Bildu y Sumar han pactado una enmienda para que el Parlamento reconozca que ese centro, «en su actual configuración, no es la mejor solución», muestre su preocupación por «la polémica que se ha creado de forma interesada e irresponsable» y por «los discursos que criminalizan la migración». Ambos grupos instan al Gobierno a «trabajar por un modelo vasco de acogida» integral y «basado en la ciudadanía universal», y a que en coordinación con Madrid avancen en la atención a personas solicitantes de protección internacional y acordar la transferencia de la competencia.