Jon Insausti asegura que asume la Alcaldía para «transformar Donostia hacia dentro»

Jon Insausti ya es el nuevo alcalde de Donostia. A sus 36 años, este vecino de Altza, natural de Alde Zaharra, toma el relevo de Eneko Goia, que renunció oficialmente al cargo hace dos semanas.
El trámite administrativo marca que cada partido podía presentar una persona para que optara al cargo, pero solo el PNV lo ha hecho. Insausti ha cosechado los respaldos de su partido y de su socio, el PSE, y al no alcanzar la mayoría absoluta –suman 13 y necesitaban 14– ha sido elegido como candidato del partido más votado en las municipales de 2025.  

Una vez completado el escrutinio, y antes de que Goia le entregara la ‘makila’ de mando, han tomado la palabra los portavoces del resto de grupos. Víctor Lasa (Elkarrekin) ha lamentado que este relevo «no se trate de un cambio de rumbo, sino de una decisión unilateral tomada por intereses partidistas», y ha defendido «un giro de 180 grados» en aspectos como la vivienda, el turismo, la calidad del aire, la conservación del patrimonio o el cuidado de los mayores.

Borja Corominas (PP) ha recordado que su partido puso sobre la mesa «un decálogo de medidas para solucionar problemas de la ciudad», pero que ni siquiera ha habido una negoaición al respecto, por lo que «hemos votado en blanco, que en realidad es un voto en contra».

Ane Oyarbide (PSE) ha destacado el valor del Gobierno de coalición, ha remarcado que Insausti es «el séptimo alcalde de la democracia» y ha reivindicado valores como «la pluralidad, la convivencia, la libertad o la solidaridad».

Finalmente, Juan Karlos Izagirre (EH Bildu) se ha dirigido al nuevo alcalde desde la experiencia de haber pasado por este cargo entre 2011 y 2015, usando un tono más personal y menos político. Así, le ha advertido de que asume «una gran responsabilidad que te cambiará la vida», y ha deseado que «la carga no afecte a tu vida personal. Supongo que tu entorno ya te lo ha dicho, hazles caso».

Una nueva generación

Tras el abrazo con su antecesor Goia, Jon Insausti ha tomado la palabra en un breve discurso en el que se ha referido varias veces a que su llegada supone un cambio generacional. «Nos han pasado el testigo y vamos a atrevernos a demostrarlo», ha remarcado.

Otras de las ideas-fuerza de su intervención ha sido la de «transformar Donostia hacia dentro, hacia las personas. Una Donostia para las y los donostiarras. Tenemos las prioridades claras: más vivienda, más seguridad, más empleo de calidad y mejorar la vida cotidiana».

Dentro de estos capítulos, ha avanzado proyectos como acelerar la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), incluyendo «una modificación parcial para construir vivienda en Auditz Akular». También plantea «modificar la ordenanza de segregaciones y cambios de uso para habilitar más vivienda».

En el ámbito de la seguridad ha destacado la inclusión en los presupuesto de la primera partida para la comisaría conjunta de la Policía Municipal y la Ertzaintza en Egia. Respecto al empleo de calidad, ha mencionado los proyectos para ampliar el Parque Tecnológico de Miramon y culminar Eskusaitzeta.

Tasa turística y los barrios

Además, ha abogado porque los recursos del impuesto turístico «reviertan en su totalidad en beneficio de las y los donostiarras», y por «incrementar la inversión en los barrios, en mantenimiento y limpieza»; abriendo nuevos espacios verdes y peatonales.

También ha comentado su volutad de potenciar la capital guipuzcoana como ciudad de cultura –un departamento en el que acumula una dilatada experiencia– y deporte, aspecto en el que es conocida su afición a correr.

Jon Insausti no ha querido comenzar su mandato sin dar gracias a su familia –ha empleado la metáfora de la mesa de la cocina como punto de encuentro–, a sus allegados y amigos, y a su «mentor» Eneko Goia. 

Antes de la elección del nuevo alcalde, el pleno extraordinario ha asistido a la toma de posesión como nuevos ediles de Tomás Pascua (PP) –que ocupa la vacante de Jorge Mota– e Idoia Gracia (PNV), que ha entrado en lugar de Goia.