La plantilla de Benito Menni cumple 100 días de huelga en Iruñea tras una marcha de tres días
La plantilla de Benito Menni ha cumplido 100 días de huelga en Iruñea tras protagonizar una marcha de tres días desde Elizondo para llevar sus reivindicaciones al lugar donde se encuentran «los responsables de la precariedad» que sufren: Hermanas Hospitalarias y Gobierno de Nafarroa.
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Frente al Parlamento ha terminado este viernes la marcha de tres días desde Elizondo que ha protagonizado la plantilla de Benito Menni para cumplir 100 días de huelga en Iruñea, donde se encuentran la Fundación Hermanas Hospitalarias y el Gobierno de Nafarroa, a los que responsabilizan de la precariedad que sufren.
Los últimos metros de esa caminata han tenido lugar en el paseo de Sarasate, donde varias personas han formado un pasillo para aplaudirles, mientras lanzaban consignas como «Benito Menni borrokan», «Borroka da bide bakarra» o «Zaintzarekin, negoziorik ez».
Las trabajadoras portaban una pancarta en la que se podía leer ‘Benito Mennni 100 greba egun!’ y se han ubicado junto a un escenario en el que había sido colocado un pino navideño para decorarlo con mensajes que recogían sus principales reivindicaciones.
Estas últimas han sido detalladas a los medios por la trabajadora Eva Arrieta, del sindicato ELA, quien ha recordado que la marcha forma parte de la movilizaciones que están realizando en la tanda de paro entre el 1 y el 24 de diciembre, y cuando han alcanzado este día las 100 jornadas de huelga.
Arrieta ha explicado que la caminata, que había arrancado el pasado día 10 en Elizondo, terminaba en Iruñea para «visualizar claramente que los responsables de la situación en la que nos encontramos están aquí y que son la empresa y el Gobierno de Navarra».
Ha recordado que el servicio que se ofrece en Benito Menni «debería ser publico, pero el Gobierno de Navarra ha decidido subcontratarlo a una empresa cuya prioridad no es poner el cuidado en el centro, sino maximizar el beneficio».
Triple efecto negativo
Ha denunciado que esa política ha generado perjuicios a los usuarios, ya que «han visto empeorada la calidad del servicio que reciben», además de a las trabajadoras, puesto que «42 se han visto afectadas por el cierre del tercer edifico de Benito Menni. Algunas han sido despedidas y otras han visto perjudicadas sus condiciones laborales».
Pero sus efectos incluso se están notando en «la comarca de Elizondo, porque Benito Menni es el centro de trabajo más grande de la zona y obviamente, la destrucción de empleo contribuye a la despoblación».
Ante todos estos perjuicios, la plantilla de Benito Menni empezó a movilizarse para «conseguir que no empeore la calidad del servicio y unas condiciones laborales dignas». Por ello, «interpela directamente al Gobierno de Navarra, que decide subcontratar el servicio en lugar de que sea público, ya que es quien financia este servicio, que se sostiene a costa del dinero público».
Y le dicen al Ejecutivo «que no puede ser que se utilice el dinero público para enriquecer a empresas privadas, en lugar de poner la calidad del cuidado en el centro, de mejorar las condiciones laborales de la plantilla, en lugar de tener unos ratios adecuados de trabajadores para que puedan atender bien a los usuarios. El hecho de subcontratar no le exime al Gobierno de Navarra de garantizar una calidad en el servicio, unas buenas condiciones laborales y los recursos necesarios».
1.100 euros al mes y 106 horas más de trabajo
Arrieta ha insistido en que «es responsabilidad del Gobierno que estas trabajadoras salgan de la precariedad». En este sentido, ha explicado su situación laboral, que les lleva a cobrar 1.100 euros al mes «con dos fines de semana trabajados». Y «con una brecha salarial de más del 30% en comparación con nuestras compañeras de Osasunbidea que realizan el mismo trabajo».
Además, las trabajadoras de Benito Menni de Elizondo «trabajan casi 1.700 horas al año, frente a las 1.592 de Osasunbidea. Son 106 horas más de trabajo. Es una barbaridad la situación en la que están».
La plantilla espera que el Gobierno de Nafarroa «atienda de una vez nuestras reivindicaciones» para poner fin a la precariedad y la brecha salarial que denuncian y le ha recordado «esos eslóganes que anuncia el Gobierno el 8 de marzo sobre esa brecha. A ver si cuando les corresponde tomar decisiones que cambien esta situación, hacen lo oportuno».
El cierre del edificio de Bertiz
Arrieta ha explicado que en estos momentos, el centro de Benito Menni de Elizondo atiende a 121 usuarios. En origen contaba con tres edificios, pero el situado en Bertiz «se ha cerrado, con 32 usuarios afectados. Cinco fueron desplazados a Iruñea, otros derivados a otras provincias y los 22 restantes fueron derivados a los dos edificios contiguos, obligándoles a ellos y a quienes ya estaban ahí a compartir habitación. Y además mezclando patologías».
También ha destacado otro efecto generado por el cierre del edifico de Bertiz y que consiste en que «no existe un recurso intermedio de movimiento libre. Ese edificio cumplía esa función, ya que los otros dos son cerrados. Según avanzaban los enfermos en su recuperación, pasaban al tercer edificio, donde iban ganando autonomía, empezaban a cocinar, podían salir al jardín, para así poder reinsertarse en la sociedad».
Ese cierre terminó de desencadenar una huelga que se ve condicionada por «unos servicios mínimos muy altos», ha denunciado la trabajadora, quien ha explicado que «en un edifico solo puede hacer huelga una auxiliar y en el otro edifico, solo otra. Hay unidades en los que ninguna auxiliar puede hacer huelga, lo que evidencia que están trabajando todo el año en servicios mínimos».