«Me llevo para siempre el cariño de todos», la despedida de Sergio de la Real Sociedad
El ya ex técnico blanquiazul deja Zubieta tras once años en el club y un paso por el primer equipo que ha sido «un sueño que, a pesar de haber dado lo mejor de mí, no ha salido como queríamos». Agradece a la afición su «apoyo incondicional, incluso en los momentos más complicados».
La vida da muchas vueltas y nunca se sabe qué deparará el futuro, pero de momento Sergio Francisco ha dicho adiós a Zubieta, la que ha sido su casa durante los once últimos años.
El de Irun se ha despedido con una carta en la que apunta que «acaba un ciclo vital», el segundo como txuri-urdin tras su época de jugador. «Un viaje que me ha permitido crecer en lo personal y en lo profesional», añade.
Sergio recuerda que fue Luki Iriarte, responsable del fútbol base, quien le llamó para comenzar con el Easo de categoría juvenil en las 2014-15. También ha querido dar las gracias «a Roberto (Olabe) y Erik (Bretos) por su visión de los procesos y su acompañamiento diario».
El ya ex técnico realista ha subrayado que «en cada etapa de Zubieta he estado acompañado por personas comprometidas, apasionadas y profesionales con las que he disfrutado y de las que he aprendido muchísimo».
En segundo plano
Tampoco ha querido olvidarse de todas las personas que «están alrededor de los equipos trabajando en un segundo plano. Su trabajo no es tan visible, pero su labor y ayuda tiene un valor incalculable».
En estos once años ha entrenado asimismo a la Real C, al Sanse y al primer equipo, «un sueño que, a pesar de haber dado lo mejor de mí, no ha salido como queríamos, pero que me ha llenado de orgullo y ha sido una experiencia que me llevaré para siempre».
En su lista de agradecimientos ha incluido a «cada persona de cada cuerpo técnico y cada jugador» que le han «acompañado» en un camino con «momentos inolvidables» como «el ascenso en Pasaia, los playoffs con Eldense y Alcorcón, el ascenso del Sanse en Zubieta o el gol de Gorro en el derbi». Tambié se ha acordado de una afición de la que ha destacado su «apoyo incondicional, incluso en los momentos más complicados». En su carta no menciona a la directiva del club.
«Me llevo para siempre el cariño de todos», concluye Sergio, quien espera afrontar «nuevos retos» profesionales «sabiendo que será imposible estar, sentir y disfrutar como aquí».