Ana Pérez, Amaia Zubieta, Aitor Idigoras y Nuria Gallego
Miembros de Steilas

Desde nuestro sistema educativo hacia la transformación social

Despedimos el curso 2014-15 con sentimientos contrapuestos. Fue un curso agridulce. Agrio por la actitud de los diferentes gobiernos, todos ellos sumisos a políticas educativas, que en vez de buscar el bienestar social, la igualdad de oportunidades en una sociedad equitativa en la que nadie se quede atrás, se han empeñado en excelencias y evaluaciones de todo tipo, modelos gerenciales, reválidas… en definitiva, políticas privatizadoras sometidas a estándares del mercado (banca y grandes empresas) y organismos como la OCDE y PISA.

Estas propuestas están destinadas más a la mejora de la economía europea, desde su propio prisma, que a los intereses reales del propio alumnado o de la sociedad.

Pese a que públicamente se empeñan una y otra vez en decir lo contrario, durante el pasado curso, los gestores de los sistemas educativos de Nafarroa y de la CAPV, en vez de escuchar a la comunidad educativa, desarrollar un sistema educativo propio y defender el euskera, han dejado la educación y el futuro de nuestro alumnado en manos de intereses económicos concretos.

Y en el caso de la CAV parecen dispuestos a aprovechar la coyuntura abierta por el ministro Wert y su tristemente famosa LOMCE, para impulsar una Ley de Educación, mediante Heziberri, que por ahora beneficia a la enseñanza privada y que supondrá un importante impulso a la mercantilización de la enseñanza.
Además, por quinto año consecutivo han dado continuidad a una política de recortes de derechos laborales  con consecuencias muy graves en el sector: destrucción de empleo,  aumento de ratio, falta de sustituciones, retraso en el acceso a la jubilación, pérdida de poder adquisitivo... A esto hay que  añadir la dejación de funciones en cuanto a la gestión del sistema educativo público y la falta de inversiones en infraestructuras públicas.

Si el seguidismo, la mediocridad y la dejadez son los símbolos de la gestión educativa en la CAV, el cambio político en Nafarroa nos ha traído aires de esperanza. El nuevo gobierno tiene un interesante programa pactado, y ahora nos corresponde exigir que su posicionamiento claro a favor de la educación pública se plasme en los presupuestos y en las decisiones que vayan tomando. Pero más allá de las buenas intenciones, queda por concretar cuál va a ser su posicionamiento y actuación ante la LOMCE, sobre la enseñanza de las lenguas propias y extranjeras, sobre la oferta pública de empleo,  la recuperación de la negociación colectiva...

También hubo muchos momentos satisfactorios: miles de familias decidieron plantarse y terminaron el curso haciendo frente a la imposición que la LOMCE y Heziberri querían aplicar en Navarra y en la CAV, respectivamente.  Es el caso de la reválida de 3º de primaria, también llamada prueba diagnóstica en Heziberri. Fueron muchas las familias que se negaron a realizar estas pruebas (sólo en uno de los muchos centros públicos en los que el Gobierno Vasco tenía previsto realizar la prueba se pudo llevar a cabo). En Navarra,  los chantajes y amenazas del Departamento de Educación hicieron que no fuese una postura mayoritaria. Seguiremos trabajando junto a las asociaciones de familias, plataformas y otros sindicatos, impulsando acciones conjuntas, que, tenemos la seguridad, deberemos  continuar  durante el curso que estos días comienza.

Además de cuestiones educativas habrá otros aspectos muy importantes   –violencia machista, TTIP, Kutxabank, Garoña, migración...–  a los que continuaremos haciendo frente en la medida de nuestras posibilidades, porque entendemos que el logro de una sociedad más justa  debe encontrar una base sólida en el propio modelo educativo y en la conciencia social colectiva.

steilas mantiene su firme compromiso de buscar acuerdos con el resto de agentes educativos, con el fin de dar pasos en la consecución del derecho a la educación recogida en la Carta de los Derechos Sociales de Euskal Herria, una educación pública, euskaldun, plural, laica y gratuita,  que garantice el derecho a una educación de calidad a todas las personas .

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