Iñaki Uriarte
Arquitecto y Documentalista

El Tour en Euskal Herria, oportunidad perdida y fracaso cultural

Continuamente se repite para justificar el despilfarro de dinero público al contratar el Grand Départ 2023 Pays Basque, inicio de Tour de France en Euskadi, que se compensará y multiplicará por mucho con el gigantesco beneficio económico recibido que será principalmente para el sector de servicios, el cártel de la hostelería, las empresas intermediarias que participan en tareas complementarias de organización, compañías de seguridad y por el hipotético atractivo turístico que produce la difusión de paisajes y quizá del patrimonio artístico que todavía no se ha derribado. Es un demagógico sermón ya escuchado en otras tantas ocasiones encubridoras de acontecimientos similares. Todo ello se logra contratando un «oportuno» informe con resultado económicamente desbordante, cosa que como se ha dicho anteriormente, se ha concedido a Ikertalde Grupo Consultor por 35.500 euros.

Si tan importante son estos aspectos materiales, más preocupante es la absoluta abulia cultural, mezclada con indiferencia y desdén, sino desconocimiento, de quienes ocupan, inmerecida e indebidamente, cargos políticos, puestos de asignación y asesores en áreas de cultura en todos los ámbitos de esta sobredimensionada administración, gobierno, diputaciones y ayuntamientos. Una vez más han demostrado su incapacidad imaginativa, penuria de inquietudes, son meros funcionarios bien remunerados impuestos por la trama del PNV.

El inicio de Tour se ha dispuesto para que toda la enorme tropa, miles se anuncia, que motiva esta estructura deportivo comercial, permanezca mayoritariamente en Bilbao varios días anteriores previos para el montaje de la salida, el 1 de julio, e incluso las noches previas de las tres etapas primeras, por mayor capacidad hotelera y operatividad, a pesar de que Gasteiz sea la salida de la segunda etapa y Zornotza-Amorebieta de la tercera. Aunque es previsible que por razones de centralidad y logística algunos equipos opten por acudir para alojarse a Gasteiz y quizá por los exageradísimos precios que, como chantaje, sino extorsión, ha impuesto el cártel de la influyente hostelería de Bizkaia.

Dado que se conocía con más de un año de antelación la fecha de esta salida y las permanencias días antes, de los responsables y los numerosos miembros de esta compleja y colonizadora empresa ASO, el Ayuntamiento, Gobierno vasco y Diputación, podrían haber ofrecido a las personas visitantes integrantes de toda esta organización inquietas por la ciudad y el país además de por la carrera y para la ciudadanía que es quien paga el despilfarro y sufre las enormes molestias de todo tipo, algo más interesante, incluso en el ámbito del espectáculo: un programa de actividades complementarias, sintomático de unas instituciones cultas. Como cualquier ciudad europea civilizada y culta, Bilbao apenas lo es, lo haría en situación semejante para singularizarse mostrando sus inquietudes, creaciones artísticas, musicales e identidad, incluyendo las otras dimensiones existentes de este deporte.

Lo único que probablemente hará la alcaldía, conocida la mediocridad de su alcalde Aburto y su sanedrín, el ritual del "Vinum et circenses" o "Bilbovino", la alcoholización permanente del espacio público, como cada vez que hay un acontecimiento por sencillo que sea que reúna forasteros o en vísperas de determinadas fiestas. Habitualmente decreta prolongar dos horas el horario de cierre de tugurios, bares de copas, discotecas y puticlubs y aumentar la ya insoportable agresión ruidosa de las noches, especialmente el fin de semana, para el vecindario. Además, deberá reforzar la seguridad ciudadana que ante el anunciado aumento de visitantes es previsible se incremente el ya elevado índice de delincuencia y criminalidad por la acreditada inoperancia policial y judicial que han convertido Bilbao en una ciudad insegura, incluso peligrosa, especialmente por las noches.

Un programa de actos complementario podría haber incluido variadas posibilidades, desde un partido de fútbol o de rugby entre equipos vascos y franceses o de París, a partidos de pelota. Así como alguna potente exposición al estilo de "El arte de la motocicleta" en Guggenheim Bilbao Museoa (11/1999-09/2000), aplicada a la bicicleta en todos sus aspectos, especialmente en un país con importantes fabricantes: Orbea, BH, GAC, Mendiz, Torrot, Conor, Razesa. Nadie ha considerado, si es que sabían algo, que en el Armagintzaren Museo / Museo de la Armería, de Eibar existe una interesante exposición de unas 20 bicicletas fabricadas en Eibar la ciudad más destacada en esta actividad. Y en Amurrio un modesto Txirrindularitza Museoa creado en 2007 por un inquieto aficionado, Alfredo Cerrillo, del que los medios, organizadores de este festejo y vividores de la cultura seguramente ignoran.

Afortunadamente, San Telmo Museoa de Donostia ha tenido la visión y compromiso cultural de organizar una exposición "Bizikletak. 150 Urte /150 Años" que se ha inaugurado el 26 de junio basada en 80 bicicletas de la colección privada de Amador Tolosa, un vecino de Pasaia que con ilusión y pasión ha ido recopilando, además de documentación, diferentes modelos de bicicletas desde la más antigua de 1860, pasando por otras utilizadas por servicios públicos hasta las más recientes usadas por destacados ciclistas vascos que lograron éxitos parciales en el Tour hace años y otras de tipo infantil, todo un patrimonio que debe ser protegido culturalmente. A su vez, felicito a estas personas por su iniciativa, sensibilidad y esfuerzo que contribuyen a aumentar el legado y la cultura ciclista.

Todo ello aconseja la creación, sino de un Museo de la Bicicleta, tal vez de vehículos o integrado en un Museo de la Industria del que, vergonzosamente, todavía Euskadi carece.

Asimismo, existían numerosas posibilidades de divulgación, incluso con conferencias relativas a la bicicleta: como ingenio mecánico, o las referencias en las bellas artes, especialmente la pintura, que son muy destacadas y abundantes.

En Euskal Herria que tiene cuatro orquestas, Euskadiko Orkestra Sinfonikoa, Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS), Nafarroako Orkestra Sinfonikoa y Orchestre Regional Bayonne-Cote Basque (Orbcb), bien se podían haber programado conciertos incluso rotando por las capitales por donde transcurrirá el Tour, excepto Iruñea ignorada en su trazado por evidentes razones políticas. Considerando además que existe un repertorio, poco divulgado, de composiciones musicales orquestales de temática deportiva e incluso algunas más particularmente dedicadas a la bicicleta. Entre ellas: "Vélocipède Polka", Op.259. 1869. Josef Strauss (1827-1870), la música más antigua dedicada a la bicicleta; "Beni Mora", de 1910 de Gustav Holst (1874-1934. Inspirada en su travesía en bicicleta por el Sahara); "Jeux" ("Juegos"). 1913. Claude Debussy (1862-1918) (Poema sinfónico durante un partido de tenis); "Rugby". 1928. Arthur Honneger (1892-1955); "The Golden Age". (La edad dorada)1929. Dmitri Shostakovich (1906-1975) (Suite de ballet sobre un partido de fútbol entre soviéticos y americanos); "Olimpic fanfarre". John Williams (1932); "Bicycle Race". Freddie Mercury para Queen (1978) y "Canto Olympico". Mikis Theodorakis (1925-2021) (Cantata para los juegos olímpicos de Barcelona 1992) (Referencias aportadas por el crítico musical de GARA, Mikel Chamizo).

Una enorme oportunidad de divulgación perdida por culpa de unos dirigentes políticos y culturales, más que ineptos, intoxicados por el virus del turismo que han perdido, si es que las tuvieron, las raíces culturales de lo que debe mostrar una ciudad y un país.

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