Pongamos que hablo del aire de Bilbao
Me resulta difícil empezar a escribir y pensar qué complicado lo tenemos los vecinos de Bilbao para disfrutar de un aire digno de ser respirado. Algo así como cuando hablamos con orgullo fanfarrón del agua de Bilbao.
¿Os imagináis que hablásemos con el mismo orgullo del aire de Bilbao? Vamos a soñarlo.
Imaginemos una ciudad pensada para las personas, no para el tráfico. Con carriles bici de ida y de vuelta que enlazan barrios y crean puentes de comunicación. Seguros y bien planificados. Los padres y las madres empiezan la mañana acompañando en bicicleta a sus hijos al colegio, a la ikastola, a la escuela y siguen con sus quehaceres.
También veo aitites en bicicleta, es un medio de transporte seguro, les permite hacer ejercicio y la ciudad es amigable para ser ciclada. Chicas y chicos con sus portátiles a la espalda atraviesan los bidegorris de camino a sus reuniones, de camino a su universidad. El trayecto pasa volando como en una alfombra mágica.
En mi sueño los peatones tienen su espacio definido, con aceras anchas, árboles que renuevan el aire y dan sombra, fuentes al paso, bancos para el descanso. Los semáforos priorizan el paseo, no hay que correr para atravesar la carretera, duran más de 40 segundos, los mayores no tienen que apresurarse en cruzar.
Los pasos están elevados, así los vehículos son los que aminoran la marcha en el paso de cebra. Las personas que se mueven de forma asistida no suben y bajan. Pueden pasear cómodamente.
¡Uy! Algo me despierta, un ciclista se pone a mi lado, llevo a mi hija en el asiento acoplado a la bicicleta, me dice que tenga cuidado, que en el siguiente cruce atropellaron a una amatxu que llevaba a su niño en la silla igual que yo. Gracias, tendré cuidado... Me quedo pensando.
Paro, me llega un mensaje, acaban de multar a un aita por circular por el parque con sus hijos en bicicleta, en un momento en el que el parque no estaba transitado. Cuidado, Miren, ten cuidado por donde te metes. Los bidegorris son inseguros, los parques no se pueden pisar sobre dos ruedas. La carretera da miedo y vamos detrás del tubo de escape de un coche. Mañana mejor cojo el metro, Ane se quedará sin el paseo en bici, con lo que se ríe.
Vuelvo a quedarme dormida, sueño.
Que bien se respira en Bilbao, da gusto, aquí llueve. El aire se sanea, huele a hierba mojada. Los árboles mudan las hojas, estamos en otoño y salir a andar se me antoja un plan increíble.
Buff, me vuelvo a despertar. ¿Qué estoy respirando? Esto es gas, me pican los ojos. Hace días que no llueve y en otoño hace mucho calor todavía. Ane vuelve a toser, vaya, lleva un par de semanas con esa tos seca y persistente. Bronquiolitis, es muy común en los niños de su edad dice el pediatra. Me quedo pensando, qué raro, una niña tan sana, sin alergias. Pues será bronquiolitis.
Esta vez ya no me duermo, dejemos los cuentos para otro día y empecemos con dos realidades:
Primera realidad: El Plan de Movilidad Urbana Sostenible 2015-2030 existe, sí, es aquel documento que suscribió el consistorio sin que parezca interesado en darle más validez que el de un papel mojado. Por favor al nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Bilbao, pónganse a trabajar en la línea de aquel documento que costó tanto aprobar. Cree la ciudad que los vecinos soñamos. Apóyese en los actores sociales que le pueden ayudar a mejorar el proyecto y ver donde no ve.
Los peatones muestran crispación con las bicicletas, las familias no ven viable circular por Bilbao sin asumir riesgos y descartan las dos ruedas.
Una ciudad amigable con las personas y los medios de transporte sostenibles es lo que los ciudadanos queremos. La estrategia número 4 del PMUS es la movilidad ciclista. Los ciudadanos no queremos bicicleta solo cuando pasa el Tour de Francia.
Uno de los enemigos principales de la calidad del aire en las ciudades son los vehículos: Los automóviles, camiones y motocicletas emiten gases contaminantes, como dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno, compuestos orgánicos volátiles y partículas finas, y devalúan la calidad de vida de sus habitantes.
Segunda realidad. Segundo enemigo: Las actividades industriales liberan contaminantes como dióxido de azufre, amoniaco, óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono, cloruro de hidrógeno, compuestos orgánicos volátiles y partículas al aire.
Al Ayuntamiento de Bilbao, deje por favor de eludir cualquier tipo de responsabilidad en el control de las instalaciones industriales que requieren de Autorización Ambiental Integrada para su operación en la villa.
Dos de las principales empresas que operan en el casco urbano de Bilbao, Sader y Profersa, han sido bendecidas con benévolas autorizaciones que les eximen de medir algunos de sus focos, o bien alguno de sus posibles contaminantes no tiene límite. Algo incomprensible desde un punto de vista de la salud y la calidad de vida.
En el año 2007, el Ayuntamiento de Bilbao, con fecha 9 de julio emitió un informe previo a la autorización ambiental en el que solicitaba textualmente en el caso de Sader «En relación al control de las emisiones atmosféricas, deberá incluirse en la Autorización Ambiental Integrada que se otorgue, la instalación de un sistema de medición en continuo, tal y como se comprometió en 1997».
Pues bien, ese sistema de medición en continuo no solo no se instala en la empresa, sino que en el año 2008 la estación de medición de calidad del aire del Gobierno Vasco situada en San Ignacio, a 500 metros de las instalaciones, dejó de emitir los datos on line.
En 2010 los equipos fueron trasladados a Erandio mucho más alejados del foco.
En el año 2021, con fecha 25 de junio, la Subárea de Medio Ambiente emite el informe previo del Ayuntamiento de Bilbao a la renovación de la autorización y omite cualquier referencia al control de las emisiones atmosféricas de Sader.
Las emisiones de los compuestos químicos de Profersa (los que se controlan) se miden una vez al año.
Al nuevo equipo de gobierno que se forme en este Ayuntamiento, por favor, escuche a los ciudadanos. ¿Cuánto más va a esperar para actuar? ¿Qué va a pasar cuando los propietarios de las nuevas viviendas del Manhattan fanfarrón se den cuenta de que en realidad han comprado en el Springfield de los Simpson?
¿Existe el concepto de prevaricación ambiental? Creo que sí, en otros países es considerado hasta delito.
El 18 de marzo de 2023 abrió el foro Mundo Futuro organizado por "El Correo", Gobierno Vasco, Iberdrola y Ayuntamiento de Bilbao, Juan María Aburto destacando la urgencia de tomarse en serio los grandes retos mundiales: «Vivimos desafíos urgentes e impostergables que afectan al planeta». Se refirió al proceso de «transformación profunda» en el que se encuentra el sistema y en el que Bilbao aspira a ser «referente», teniendo como tiene asignados sus objetivos de desarrollo sostenible a cada una de las actuaciones que lleva a cabo.
Al nuevo equipo de gobierno, esperemos que las palabras no se las lleve el viento, o la contaminación.