Txaro Marquinez Idiaquez

Prefiero usuarios tristes, antes que muertos

A finales de agosto, el señor Sola nos recibe a los familiares que veníamos realizando concentraciones. Le trasladamos nuestras reivindicaciones, así como lo recogido por Médicos Sin Fronteras, por gerontólogos y geriatras de prestigio, por profesionales de atención sociosanitaria... Nos escuchó y ahí quedó todo su compromiso.

El pasado jueves el Sr. Sola, diputado de Politica Social de Araba, menos acertado estuvo de todo haciendo esta declaración. Desde el 9 de marzo, la situación que se está viviendo en la mayoría de las residencias está siendo preocupante y muy, muy dura, tanto para los usuarios y usuarias, como para sus familiares.

Residentes aislados en sus habitaciones. En algunos casos, a pesar de no tener ningún positivo. Aislados, como en la residencia Ajuria, pública, en habitaciones con las persianas rotas y con una bolsa de plástico negra como cortina. Escasez de medios de prevención. Limitaciones en la comunicación con sus familiares. Y un largo etc. Nulo control desde las diferentes administraciones, de la gestión de la pandemia en las residencias privadas, cuyos usuarios reciben una cantidad económica de la Diputación, en función de su dependencia. Dejación total y absoluta.

El 3 de junio, cuando se inician las visitas, si así se les puede llamar, descubrimos el deterioro físico de nuestros familiares, porque el cognitivo y la situación depresiva en la que se encontraban la veníamos denunciando desde abril.

En julio pudimos sacarlos a pasear, algunos solo durante ocho días, y ahí pudimos ver tanto el grave deterioro cognitivo como el físico.

Durante este periodo, ha quedado patente que la calidad asistencial ha dejado mucho que desear. Con el principio de todo vale contra la covid-19, se ha hecho dejación de necesidades muy importantes, como es cuidar y tratar las patologías que ya tenían.

Algunos familiares, después de intentar por todos los medios que la situación de las residencias y de los centros de día cambiara, nos organizamos y salimos a la calle pidiendo visitas dignas, paseos en la calle, acompañados de sus allegados y cobertura de las necesidades de los usuarios de centros de día cerrados. El detonante de estas concentraciones fue la prohibición de las salidas, el 19 de julio.

Tanto el diputado general de Araba, como el diputado de Política Social, se justificaban diciendo que había familias que estaban de acuerdo con la restricciones de las «visitas» y la prohibición de las salidas. Mientras ellos hacían estas manifestaciones, cada vez eran más los familiares y distintos colectivos sociales y particulares que nos hacían llegar su apoyo y adhesión a nuestras reivindicaciones.

A finales de agosto, el señor Sola nos recibe a los familiares que veníamos realizando concentraciones. Le trasladamos nuestras reivindicaciones, así como lo recogido por Médicos Sin Fronteras, por gerontólogos y geriatras de prestigio, por profesionales de atención sociosanitaria... Nos escuchó y ahí quedó todo su compromiso.

El señor Sola, en la comparecencia del jueves en Juntas fue patético. Se limitó a relatar su buen hacer, faltando en unos casos a la verdad y en otros omitiendo datos. Fue llamativo que no hiciera autocrítica alguna. Justificó las medidas excesivamente restrictivas porque su objetivo es «proteger» la vida de los residentes. Hubiera sido creíble si hubiera dicho la muerte en vida de los residentes. Todo lo han hecho muy bien y para proteger a los más vulnerables. Una gran mentira. Lo único que ha intentado ha sido proteger su imagen, y tampoco lo ha conseguido.

Dijo que han pecado de exceso de prudencia, y que se siente orgulloso de ello. ¿Cómo se puede estar orgulloso de una gestión que ha dejado tantos usuarios por el camino? ¿Como les han protegido desde el 19 de julio hasta hoy? ¿Cuantos contagios y fallecimientos ha habido en este periodo? Claro, como tienen patologías previas..., su gestión esta justificada.

También dijo que van a permitir la salida con los familiares, recordando que en julio hubo comportamientos irresponsables en las salidas. ¿Que intenta justificar con ésto? Señor Sola, en la calle hay ladrones y no por ello se nos trata a todos los ciudadanos como tal. Recordó que estas «medidas» variarían según la situación epidemiológica de cada momento. Consultando los boletines del Departamento de Sanidad de la semana del 1 al 19 de julio y los de esta última semana, permítanos que nos reiteremos en que las medidas cambian en función del rédito politico que usted pueda obtener.

La frase de «prefiero usuarios tristes, antes que muertos», dejó claro que lo que usted prefiere son usuarios que mueren de pena a usuarios que mueren de covid-19. Porque los fallecimientos por covid computan y le desprestigian, por eso siempre los acompañan de «tenían patologias previas», y los fallecimentos de pena, también con patologias previas, no.

Los familiares lo que queremos es una vida y una muerte digna para nuestros familiares, porque que tienen patologias previas ya lo sabemos y gestores sin escrúpulos, también.

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