La prueba de que somos es que estamos, por lo tanto, existimos. Sí, existimos y se va notando cada vez más y mejor, pues nuestro pueblo despierta (tras largos tiempos de mortal dominación e imposiciones negatorias, torturas, muertes y genocidio) en la línea correcta y necesaria. Todo ello tiene que ver con la aceptación por una mayoría poblacional de las propuestas que la izquierda soberanista abertzale viene ofreciendo con su trabajo y decisión. Todo ello a pesar del trabajo sucio de grupos políticos regionalistas y «socialistas» que no dudan en unirse para frenar el avance de quienes se empeñan en hacer de Euskal Herria una nación libre y soberana; la prueba de lo expresado resulta de la unión entre el PNV y el PSE para seguir siendo una autonomía regional y marear la perdiz con el debate sobre la reivindicación de unas competencias que llevan más de 40 años pendientes de transferencia para completar un estatuto de autonomía obsoleto, así como para repartirse entre ambos el pastel y los sillones de la dominación.

En la Conferencia Política de Donostia, Arnaldo Otegi ha dejado claro lo que EH Bildu pretende cara al futuro («vocación de Estado») y para ello ha desgranado los pasos dados y los pendientes que corresponden a toda la militancia abertzale (no solo a la encuadrada en EH Bildu, también a toda esa fuerza asimilada por el falso estatutismo regionalista), pues el trabajo en común propiciará que los logros para una existencia en libertad sean posibles. «Sin pasión no se consigue nada...», esto decía el sardo Antonio Gramsci en sus "Quaderni del Carcere" con la clarividencia que le caracterizaba, para ofrecernos a continuación la «Filosofía de la Praxis» como método de trabajo para un buen orden libertador desde una perspectiva honesta y reivindicativa. Ya lo dije en otra ocasión, desde mi punto de vista estamos viviendo momentos dulces y los contrarios lo han captado, pues se revuelven y enfrentan, ya que las contradicciones y mentiras ejercen entre ambos y cada cual debe responder ante su militancia, a la cual tratan como números contratados o como lacayos a su servicio. Son momentos dulces y de esperanza, pues ese «frente amplio» que se ha generado en torno al soberanismo abertzale supone una realidad innegable, donde la unidad de ideas y respuestas ante los problemas reales de la sociedad, permiten una praxis correcta y nada dependiente de corrupciones y personalismos. Todo ello gracias a la implicación de miles de militantes que desde Ayuntamientos y Concejos demuestran día a día sin olvidar las necesidades de la población; sin olvidar, también, el trabajo parlamentario y la solidaridad internacional de nuestros representantes, además de la defensa de nuestras reivindicaciones históricas con claridad y transparencia. La militancia y la juventud deben ser atendidas con mimo y transparencia, pues son ellos y ellas quienes van a hacer realidad ese futuro socialista y liberador. Hagamos caso a Gramsci y pongamos pasión en nuestro proyecto, hagamos caso a Arnaldo y fijemos nuestros objetivos para que sean una realidad en el tiempo.

En estos años edadistas, donde la vejez y los traumas concurren, las lecturas no siempre suponen placer y algunas rompen con la racionalidad y provocan hastío y necesidad de respuesta. El 20 de septiembre el diario "Berria" entrevistaba a Eneko Andueza, secretario general del PSE, en el cual aporta con absoluta sinceridad su pensamiento sobre lo que piensa para Euskal Herria y su futuro. Entre las variadas «perlas» del inquieto y versátil Andueza surgen cuáles son sus objetivos directos. No asume una mayoría abertzale que pudiera votar con libertad el derecho a decidir y amenaza al PNV si avanza hacia un nuevo «estatus» para la nación vasca. La imposición de la unidad territorial de la España peninsular no está en juego. Este es el partido con el que el PNV ha pactado para gobernar e imponer una mayoría, lo cual debe hacernos pensar cuáles son los verdaderos objetivos de Ortuzar y Pradales cara al proyecto de futuro para nuestro pueblo. Si el nuevo estatus lleva el camino que marca Andueza no nos queda otro remedio que rebasar los votos de PNV y PSE para lograr la independencia de Euskal Herria. Son dos partidos de derechas y se entienden a la perfección, lo cual nos conduce a seguir creciendo y ganarles en las urnas y en los pueblos vascos. Hay otro tema que duele y demuestra las varas de medir del neófito Andueza, ante la siguiente pregunta en la entrevista: «EH Bildu ha dicho en más de una ocasión a las víctimas que «siente el dolor provocado desde el fondo de su corazón». Respuesta de Andueza: «Todavía les queda un largo camino por recorrer». Continúa: «¿Prevé algún cambio en la dinámica de socialización de los presos vascos en el Departamento de Justicia?»: respuesta: «La Ley está clara y solo obedeceremos la Ley». Estos son los mimbres con los que trabaja el señor Andueza, contrario al derecho democrático a decidir. «Euskal Herria es igual que Aragón en el tema nación». Este hijo de los GAL se permite el lujo de decir que ante el pasado violento EH Bildu «tiene todavía un largo camino que recorrer», cuando en EH Bildu hay partidos que nada tienen que ver con la violencia y el PSE si está implicado con la contratación de mercenarios, con dinero público para matar vascos. Los responsables de los GAL fueron tratados con guantes blancos a la hora del cumplimiento de las condenas correspondientes y en algunos casos ignorados como el señor X. Lecciones las justas, señor Andueza, pues en este país nos conocemos todos y sabemos de las intenciones de conveniencia, es posible que le llamen al orden y en algún momento deberá tocar la puerta de los vascos y las vascas malas... Gora herria! Euskal preso politiko eta iheslariak etxera!

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