Recurrimos al Ararteko para que instara al Ayuntamiento de Bilbao a registrar un terreno de la autovía en el barrio de Zurbaran, hoy reconvertida en boulevard. La finca registral (30486) del mencionado terreno de la autovía está a nombre de la constructora Panera, en vez de ser de titularidad pública.

Este hecho no tendría mayor importancia sino fuera porque la mencionada constructora usó la mencionada finca registral en los juzgados contra el Ayuntamiento y vecinos de la zona. Pero no solo la usó en el pasado sino que también la ha aportado como propia en un contencioso-administrativo que ha iniciado contra el Ayto. por el que le pide 18 millones de euros (3.000 millones de las antiguas pesetas) y que actualmente está en el Tribunal Supremo.

Esta situación solo se explica por la estrecha «colaboración» entre constructora y ayuntamiento, excepto con los alcaldes Robles y Gorordo que trataron de registrar los mencionados terrenos e interpusieron un recurso gubernativo en el año 1991. Las irregularidades“ consentidas fueron las siguientes: no se expropio el terreno de la constructora pesar de que en el proyecto del MOPU y en el BOB de la provincia la parcela 55 de Panera iba a ser expropiada para la autovía. La finca de la constructora fue la única que no se expropió y ni siquiera se hizo expediente expropiatorio; no hay acta de ocupación, no se pagó y no se registró. A esto hay que añadirle que se efectuó un corrimiento de la finca registral (30.486) que graciosamente ha «consentido» el Ayuntamiento a la constructora. Esto ya es un presunto delito de falsedad en documento público. Todo esto, hoy, con la bendición del Ararteko.

La Resolución 2015IR-681-2014 del Ararteko, de 20 de febrero de 2015, asume la negativa del Ayuntamiento de Bilbao a inscribir en el registro de la propiedad una finca municipal. En síntesis, el Ararteko da por buena la información que elaboró el Área de Economía y Hacienda del Ayuntamiento a pesar de que dicha área cambió la razón de la negativa dada en los informes en menos de un mes y obviando la abundante documentación pública aportada por los vecinos; escrituras de todo el grupo de viviendas, Fincas registrales, Boletín Oficial de Bizkaia, plan MOPU y Resolución Gubernativa de 1991.

Aunque hay muchas más, el Ararteko debería de hacerse las siguientes preguntas:
- ¿Por qué no se efectuó la expropiación de los terrenos de Panera que le ocupo la autovía?
- ¿Dónde está la finca registral de la autovía si la finca matriz está agotada y en ella no está la autovía?
- ¿Por qué se cambiaron los linderos de la finca matriz?
- ¿Por qué los terrenos de la autovía están registralmente a nombre del constructor si como ha apuntado en su resolución las Corporaciones Locales están obligadas a registrar los bienes públicos?
- ¿Por qué da por bueno el corrimiento de la finca registral de los terrenos de la autovía que es de titularidad municipal?
- ¿Por qué la constructora presenta como suya en el contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento la finca registral de la autovía y por tanto del Ayuntamiento.? Y lo que es más grave ¿por qué el Ayto. no se opuso?

Con todo el respeto a D. Iñigo Lamarca, siento tener que decir que la resolución que nos ocupa es una monumental chapuza, que deja barra libre a la constructora para que siga utilizando la finca de la autovía a su libre albedrio y que ha entrado, por méritos propios, en la historia negra de Zurbaran. No se va a registrar la finca municipal de la autovía, que contradice la obligación de la administración de poner todos los medios para que los ciudadanos no sean perjudicados ni estafados. Los vecinos ya lo fuimos con un coste aproximado de 300.000 euros y el Ayuntamiento con un coste aproximado de 72 millones de euros en aprovechamiento urbanístico.

Finalmente recordar que el Ararteko si no defiende al pueblo, deja de ser Ararteko.