Aimar Arrieta

¿1939 o 2018?

2018, recuerda el año en el que estamos. Todavía siguen, después de año y medio, discutiendo si fue o no fue terrorismo la trifulca en el bar Koxka en Altsasu, Navarra. Nueve personas están siendo juzgadas por terrorismo por una pelea de bar contra dos guardias civiles, no identificados, y sus parejas. Todos los jóvenes están luchando por su libertad cuando la Fiscalía pide 62 años y 6 meses de prisión para uno de ellos; para una joven pide 12 años y 6 meses por amenazas terroristas y los otros 7 juzgados se enfrentan a 50 años de cárcel por cuatro delitos de lesiones terroristas.

Hoy en día llamamos terrorismo a todo. Desde el cese de armas y de la violencia de ETA un sector de la prensa no sabe qué hacer para difamar a Euskal Herria, y utilizan a estos nueve jóvenes para seguir hablando mal de un país que desde hace ya tiempo es un territorio pacífico donde se puede habitar sin problemas ni disputas. Solamente hay que leer los titulares de algunos periódicos para darse cuenta que están intentando desprestigiar a Euskal Herria, titulares como el de hace dos años de "El País" "El fantasma de la kale borroka resucita en Alsasua" o el del periódico "El Mundo" "Bullying en Alsasua", estos titulares llaman la atención a cualquiera ya que la historia es reciente, y aunque el terrorismo y el régimen totalitario de Francisco Franco ya acabó, la gente sigue pensando en ello.

Y ahora vienen a llamar fascistas a estos jóvenes por este enfrentamiento que ocurrió, porque por si no os habéis enterado, la fiscalía ha etiquetado el ataque como «xenofobia y fascismo». El fascismo es una doctrina de carácter totalitario y nacionalista, y la xenofobia es un rechazo a los extranjeros. La fiscalía ha llamado fascistas y xenófobos a estos chicos cuando la historia de España habla por sí sola, se sabe qué banda es la fascista y qué banda la revolucionaria, pero ahora por «supuestamente» dar una paliza a estos guardias civiles, no identificados, y sus parejas, les llaman fascistas. Me pregunto: ¿Qué hubiera pasado si esta trifulca hubiese pasado en Vejer de la Frontera, Cádiz?

En conclusión, estas resoluciones judiciales donde a unos chicos les acusa de terroristas por dar una paliza en fiestas del pueblo de Altsasua a cuatro personas de origen español, no está nada bien, pero dar una paliza a estas cuatro personas tampoco lo está, ya que no se puede discriminar a nadie por sus orígenes. Meter a nueve personas en prisión por pegar y llamarles terroristas significa que algo se está haciendo mal en un país donde una violación por cinco «hombres» a una mujer solo se sentencia a nueve años de prisión a cada uno. 

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