Pedro Mari Usandizaga Añorga | Ondarroa

A Rajoy ya no le creen

El gobierno de Rajoy durante la crisis se gastaban miles de millones en rescatar bancos y autopistas, claro no se puede explicar que no se suben las pensiones.

Claro está Rajoy repite el argumento expuesto en el Congreso en el debate sobre pensiones: no se puede subir más, ya me gustaría subir y las subiré todo lo que se pueda. Luego el rollo parlamentario, medias verdades y medias mentiras para adornar el discurso. Muchos miles de pensionistas le han dejado claro en la calle que ya no le creen.

Argumentan las previsiones que pronostican que cada trabajador tendrá que pagar a tres, cuatro o cinco pensionistas, por tanto necesitan que la población disminuya y los jóvenes se sigan marchando para no volver.

España gasta al año 300.000 millones, la tercera parte se destina a pensiones, un porcentaje muy por debajo de cuánto invierten en la UE, cuyo gasto es cinco puntos por encima del nuestro.

El propio Rajoy nos confirmó ufano que ahora se crean seis empleos por cada nuevo pensionista. El dato resulta incontestable: el problema no está en el empleo sino el reparto de los beneficios. Tampoco se callan cuando se les recuerda su supuesta condición de privilegiados o lo insostenibles que serán unas nuevas pensiones que no dejan de crecer.

Más de la mitad de los pensionistas cobran por debajo del salario mínimo y apenas un 10% supera los 2.000 euros al mes. El problema de nuestro actual sistema es precisamente el contrario: que quienes más deberían contribuir, por su renta y riqueza durante sus años de actividad, están fuera de un sistema al que no quieren contribuir, cuánto más se recorte, mejor, menos impuestos.

Cuándo sube a los pensionistas el  0,25%... los diputados se subieron 1,5%.

No se trata de que no se pueda o no haya dinero, se trata de que en un país cuyo esfuerzo fiscal se sitúa cinco puntos por debajo de la media UE15 quienes deberían y podrían pagar, ni deben ni quieren pagar.

Salud y República.

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