Se cumplen ahorita mismo 25 años de aquella inolvidable noche en la que alumbraron a GARA. Lo hicieron los mismos que fabricaban ‘Egin’ y se dejaron la piel y el miedo en el empeño. Pero sin vergüenza, porque allí, detrás del cordón de policías armados hasta los dientes, haɓía un pueblo que gritaba ‘Aurrera’.

Un cuarto de siglo, y ahí está GARA, como ‘Egin’ está en la memoria de cuantos hicimos algo allá.

La lista de compañeros que colaboraron en esta formidable tarea es, a buen seguro, interminable. Barrios, pueblos, ciudades... Al norte y al sur del Bidasoa; en nuestra diáspora. Una movilización magnifica que dio un fruto exquisito, aunque el sacrificio humano que nos impuso el Imperio Español resultara insufrible.
Hoy faltan algunos, cosas de la puta vida, pero aquí estamos y seguiremos estando. Porque la verdad sigue siendo importante.

Beti gogoan, lagunak beti lagun, Salu, Manu, Isidro, Nerón, José Ramón, Teresa, Jesús, Periko, Julio, Dakota, Gurufio, Elorza eta hainbat horrenbeste. Aurrera doa gure bolie!