Hola a todos y a todas:

Hace aproximadamente tres meses que me gradué en Trabajo Social, pero, meses antes de acabar, ya sabía que lo que quería hacer una vez acabada la carrera era seguir formándome y aprendiendo cursando un posgrado de Gestión e Innovación en Servicios Sociales compaginando este con unas becas de transición al mundo laboral. Pero la UPV/EHU me niega la ayuda de un TEAE (Técnico o Técnica Especialista de Apoyo Educativo); es decir, una persona que me ponga al baño, me ponga o me quite la cazadora y me coloque el ordenador. Puesto que soy una persona con movilidad reducida (PMR).

El motivo principal en el que se basa el servicio de atención a personas con discapacidad de la UPV para negar los apoyos es que no consideran oficial el máster por ser de título propio, es decir, que se trata de un posgrado de especialización y una vez finalizado este no tendría acceso a un doctorado. He hablado con la Facultad que se encarga de impartir este máster y dice que oficial sí que es. Es un posgrado ofertado por la propia Universidad. ¿Cómo puede ofertar una universidad un máster que no es oficial?

El reglamento de igualdad de oportunidades para la atención de personas con discapacidad de la UPV/ EHU dice: «El objeto de este Reglamento es regular las acciones de atención al alumnado de la UPV/EHU con discapacidad, y en general con necesidades educativas especiales, para facilitar su acceso en la Universidad, el desarrollo de sus estudios y la plena participación, garantizando el derecho a la educación en igualdad de oportunidades con el resto de estudiantes durante su permanencia en la universidad». Y esto no se está cumpliendo.

En definitiva, me siento discriminada por mi condición de discapacidad y las necesidades de apoyo inherentes que esta trae consigo.

Estoy muy cansada de los típicos discursos de la inclusión, pero luego a la hora de la verdad solo sea una palabra que queda bonita a los ojos de la sociedad. Si se habla de inclusión que sea con razón, ya que como dice un gran dicho popular, «obras son amores y no buenas razones».

Desde el propio Departamento de Discapacidad de la UPV se me invita a renunciar al posgrado y a las becas de transición. Esto me invita a seguir luchando por nuestros derechos y que queda mucho camino por recorrer en el ámbito de la inclusión.

Gracias de corazón...