Pedro Mari Usandizaga Añorga | Ondarroa

Díaz Ayuso abre la batalla con las autonomías

Madrid se benefician del llamado efecto capitalidad, tiene una mayor recaudación fiscal derivada de la concentración en su territorio de los principales organismos del Estado, de las mayores empresas y de las fortunas más grandes del país. Dicha comunidad arrastra una historia de casos de corrupción que han salpicado a casi todos los recientes antecesores de la actual presidenta a diferencia del resto de las autonomías, es porque goza de unos privilegios que las otras no tienen. No resulta muy coherente tampoco que Díaz Ayuso prometa una sustancial rebaja del IRPF a sus ciudadanos, así como otros beneficios fiscales, mientras al mismo tiempo reclama mil millones de euros anuales al presidente del Gobierno.

La «rebaja fiscal más grande en la historia» de la comunidad autónoma madrileña, anunciada por su nueva presidenta, la popular Isabel Díaz Ayuso, ha abierto un frente de batalla política con el resto de las Autonomías, que se oponen a la iniciativa. Fundamentalmente que se trata de una clara competencia desleal en materia fiscal.

Díaz Ayuso, sin quererlo, ha puesto sobre la mesa la necesidad de que el nuevo sistema de financiación autonómica que debe negociarse en la nueva legislatura. Las rebajas fiscales de las comunidades deben ser consecuencia de una buena gestión que genere ahorro público, o bien de recortes en los presupuestos autonómicos para ajustar el gasto, pero no de pedir más dinero al Estado o de recurrir al aumento del endeudamiento.

Entrar en una competencia fiscal entre comunidades, y aún más si es desleal, como sucede en el caso madrileño, perjudica al conjunto del Estado. Esta deslealtad acabará con la competencia fiscal de la Comunidad de Madrid con el resto de las autonomías. Pagarían justos por pecadores (?).

Salud y República.

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