El triunfo del militarismo ideológico
El éxito de la cumbre militarista en Madrid, con unos dirigentes adictos a una economía globalizada que está en caída libre, teatralizaron el encuentro con las respectivas parejas, y nietas de turno, sin ningún miligramo de populismo al comprar alpargatas, como cualquier consumidor de Ryanair. La promoción turística de la efemérides que utilizó una pinacoteca como alta cultura, no deja de ser la diana sublime del imperialismo cultural más degradante que se pueda conseguir, cuyo blanco era un cuadro de un pintor que vendió su alma al opresor, que todavía nos sigue inyectando morfina al no podernos liberar de semejante majadería ideológica.
El espectáculo organizado por los dirigentes políticos aparte del gasto indecente de estos personajillos del tres al cuarto. Toda la corte de periodistas adictos a la globalización más criminal, que saturaron todos los burdeles de lujo y restaurantes. Este dispendio lo pagamos los idiotas de turno. De un teatro hueco sin sustancia que lo único que busca son los cadáveres y la sangre de sus súbditos de la tramoya democrática, que ya no se puede disimular que la democracia que dirigen estos individuos es una farsa de truhanes. El objetivo de este desfile de fotos y de comentarios neuróticos, lanzando el dardo como cualquier mafia de los que no están dispuestos a someterse a las gracias de estos electos trucados, que lo único que consiguen es asfixiar a los pobres y a nuestro hábitat. El resumen no es otro que nos vayamos mentalizando, si la Federación Rusa, no se pone de rodillas, y no pide perdón, vamos directo a una guerra total. Como esto no sucederá por las buenas, no hay que ser un superdotado para tener la seguridad que el objetivo se conseguirá a base de cadáveres, violaciones, destrucciones de viviendas, y de hambre, mientras la población en Europa, se mueve como los títeres, ya que su objetivo de vida es viajar sin ton ni son.
El segundo acto, se ha preparado con la visita de Biden, a Israel, divididos entre halcones y palomas, respecto a la intervención contra Irán. La situación es de un gran riesgo si no renuncian a su soberanía y se avienen a las exigencias de Occidente. La catástrofe no existe, son los caminos que los dirigentes escogen y los resultados son los que son. Como la sentencia de un Tribunal Supremo, que unos cuantos individuos patriarcales pistoleros, se meten con todo descaro en la vida privada de las mujeres, como cualquier Tribunal Inquisitorial. Hay que ser muy estúpido para creer en esta ideología falsa, sedienta de sangre, que lo único que busca es dominar con sus miserias de valores mentirosos, a toda la humanidad. Aumentar los gastos para la guerra, potenciar las bases militares por toda Europa, con el beneplácito una vez más de los socialistas, que siempre han sido los más guerreros, los más hipócritas, y los más miserables. ¿Qué diferencia existe entre estos estafadores, con la derecha más pistolera?
En fin, estamos sometidos por una estructura dictatorial en que la ciudadanía está esclavizada, anestesiada, adormecida, y preocupada para poder pagar un crucero maravilloso, por los mares plastificados, que da sentido a su vida.
Atentamente,