¡Jesús, el pastor que no falla!
¡Jamás te defraudará!
Ni en los largos inviernos de tu vida.
Ni el ocaso de tus fracasos.
A él solo le interesa que seas enormemente feliz.
Que no te preocupes por tus fallos morales, ni por tus bajones psicológicos.
A él eso no le importa y te dice que no hagas caso porque eso es un espejismo.
A él solo le interesa que seas feliz, que confíes en él, como lo hace contigo.
Y que, a pesar de las dificultades de la vida, que sepas que siempre te ha acompañado y que ahora con más fuerza está contigo.
Él te ha elegido y te llama por tu nombre.
Y está locamente enamorado de tu vida, de tus proyectos y quiere que los compartas con él.
Y que luego seas pastor con todos tus hermanos, que desde lo más profundo de sus corazones te están gritando.
¡Que seas su pastor como Jesús lo es contigo!