Juan José Dapousa Garma | Bilbo

La desmemoria

Entre el 31 de agosto y el 2 de octubre de 1936, 122 vascos encerrados en los barcos prisión Cabo Quilates y Altuna Mendi, en la ría de Bilbao, fueron torturados y salvajemente asesinados sin juicio previo. Las matanzas fueron realizadas por milicianos y por marineros republicanos. Uno de los primeros asesinados fue Gregorio Balparda, gran demócrata liberal y alcalde de Bilbao. En 2017, con un informe de parte de Gogora, haciendo una interpretación sectaria de la Memoria «Histórica», y contra sentencia firme, se quitaron y ocultaron símbolos e inscripciones de víctimas inocentes en el cementerio de Bilbao en Derio. La dignidad de esas víctimas exige que sean inmediatamente repuestas. En sustitución de la Ley de Memoria «Histórica», el Gobierno ha aprobado el anteproyecto de Ley de Memoria «Democrática», que, entre otras novedades, pretende declarar nulos todos los juicios y sentencias de tribunales franquistas. En justa correspondencia y para ser «democrática», deberían declararse nulos todos los juicios y sentencias de las Juntas Calificadoras, de las Juntas de Defensa y de los Tribunales Populares, que, utilizando los mismos métodos de Lenin o Stalin, no eran más que unas chekas políticas encargadas de depurar a sus antiguos adversarios.

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