Pedro Mari Usandizaga Añorga

La riqueza sin conciencia

Salafísmo, como toda ideología de extrema derecha, rechaza igualmente cualquier avance sociopolítico en la sociedad, Es particularmente la democracia y el laicismo, responsables de «corromper la fe musulmana». Los contratos de 10.000 millones de los estados europeos con Arabia Saudí y los países del Golfo ciegan a los gobiernos e impiden una lucha efectiva contra las raíces del extremismo islámico y «la ideología radical y violenta que transmite Arabia Saudí a los terroristas». La vía pacífica y pedagógica de la predicación islámica es financiada generosamente por los gobiernos de Arabia Saudita y Qatar en todo el mundo.

Un funcionario francés especialista en terrorismo, hizo un análisis de la expansión del extremismo en Europa. En síntesis, Arabia Saudí y los países del Golfo financian la expansión del salafísmo (la doctrina que alimenta el odio y la violencia) para influir en Europa a largo plazo. Los gobiernos europeos no actúan con contundencia contra los focos salafistas para no enemistarse con los señores de los petrodólares. Además, Reino Unido, Francia, Alemania, Bélgica y España tampoco quieren arriesgar sus contratos multimillonarios de exportación de armas a esos mismos países.

¿Tenemos que recordar los días en que todos fuimos Londres, París, Berlín, Bruselas o Madrid? El terrorismo yihadista, el delirio del Estado Islámico; supuran miseria, desesperación y un dolor infinito. Pero en la trastienda de las tierras hay despachos alfombrados, cuentas bancarias millonarias y el delicioso glamour de la riqueza sin conciencia. Quizá todos somos víctimas… pero unos más que otros.

Salud y República,

Pedro Mari Usandizaga Añorga

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