La asamblea celebrada el 27 de diciembre del 2015 en Sabadell por parte de la CUP, es una muestra impagable que es imposible enviar una nave espacial a otro planeta sólo con lampistas. La historia está llena de ejemplos de estas minorías de iluminados que son incapaces de construir absolutamente nada y que su único fin es dinamitar cualquier proyecto emancipador, y como son conscientes de su ignorancia, en vez de configurar una red de relaciones y de conocimientos, se limitan a una declaración de impotencia para anular cualquier proyecto político, en definitiva son incapaces de practicar la libertad.

Afortunadamente está postura propiciará saltar la tapa y sabremos quienes realmente quieren cambiar de planeta, por lo tanto el proceso sale reforzado.

Atentamente,