En relación al viaje a Manchester el próximo 23 de octubre con viajes Eroski para ver a la Real, quiero mostrar mi profundo malestar con la gestión realizada por dicha agencia. Viajes Eroski hizo llegar a los aficionados los diferentes paquetes a través de los medios de comunicación y ha sido de esta forma como la gran mayoría hemos podido saber de las características del viaje. En mi caso, tal y como aparecía en los medios de comunicación, la salida del avión para el pack de una noche de hotel era desde Biarritz, aunque sin concretar horarios.

Cuál es mi sorpresa, y la de la gente de mi entorno, cuando 6 días antes de la salida se nos comunica que el avión sale desde Vitoria-Gasteiz a las 5.30 de la madrugada y vuelve a Bilbao al día siguiente. A todo esto, el autobús que nos traslada al aeropuerto sale de Anoeta a las 1:45 de la madrugada. Viendo el panorama, se nos ocurren diferentes alternativas. Primero, ir en nuestro coche a Vitoria, pero teniendo en cuenta que el avión llega a Bilbao, desechamos esta opción. Segundo, pedir a Viajes Eroski la posibilidad de ir en el avión del día anterior para no tener que soportar este martirio de horarios. Pero se nos comunica que no se puede cambiar porque todos los paquetes están vendidos. ¡Cómo no van a estar vendido si sólo quedan 6 días y es cuando hemos recibido la información! La tercera opción sería la de exigir que el avión saliera desde Biarritz, pero ni lo intentamos porque sabemos que se escudarán en que ellos, como agencia, nunca han determinado hasta 6 días antes desde dónde sale el avión. Como cuarta opción, pedimos la devolución del dinero, pero se nos dice que es imposible. Está claro cuál ha sido la estrategia de Viajes Eroski. Utilizando como reclamo comercial ante los aficionados la seguridad de obtener las entradas para ver el partido, han ofrecido unos paquetes con unas condiciones de vuelo cómodas hasta que ha llegado la hora del viaje y se ha visto lo que realmente hay. Lo que no se puede hacer es tener a miles de aficionados viajando en estas condiciones habiendo pagado unos precios abusivos. Desde luego que han perdido a un cliente, y me atrevería a decir, que a muchos más.