La Diputación Foral de Bizkaia prevé cobrar una tasa de doce euros a quienes se presenten a los exámenes de sus Ofertas Públicas de Empleo. Llama la atención que las dos únicas exenciones para no abonar dichas tasas sean las personas con un grado de discapacidad igual o superior al 33% y las familias numerosas. No parece justo que no se tenga en cuenta la capacidad económica de los aspirantes, ya que en algunos casos puede tener un poder adquisitivo mayor una persona con discapacidad o perteneciente a una familia numerosa, que un opositor que este en desempleo. Dado que el anteproyecto de norma tiene que ser debatido en las Juntas Generales, sería conveniente que, en estos tiempos de pandemia con un desempleo galopante en el que una OPE es una de las pocas oportunidades de empleo, los junteros consideren eximir de dicha tasa a los aspirantes que figuren como demandantes de empleo al menos  desde un mes antes de la fecha de la convocatoria y no perciban prestaciones económicas, y que además, se tenga en cuenta la capacidad económica de otros colectivos a la hora de eximirlos o no de dicha tasa. Principios de igualdad, merito y capacidad, también de capacidad económica para presentarse a una OPE.