Hay una frase que circula por todo el planeta mediático, en el que los políticos, y periodistas de los medios de comunicación más influyentes, repiten hasta romper los tímpanos: los problemas complejos, no tienen soluciones simples. Sería conveniente preguntarse, si los problemas simples, se complejizan por intereses infames. Una de las innumerables muestras la tenemos en nuestro propio habitad que es Catalunya, desgraciadamente los ejemplos son innumerables por todo el espacio sideral.

El desarme de ETA facilitado por medio de la colaboración de diversas entidades civiles y religiosas, que debería celebrarse como un gran acontecimiento, en el que la sangre se transforma en vida y no en muerte, como el gran día soñado. La mezquindad del partido del gobierno y de los de la oposición, tanto de derecha como de izquierda, cuyas declaraciones realizadas por la entrega de las armas a través de un ritual lógico, se constata el complejo de inferioridad del gobierno y de los demás partidos políticos, que relucen más que el sol. La sed de venganza que destilan sus comentarios que son de una simpleza y de una inhumanidad sin límites. Si éstos se consideran humanos. Prefiero ser sólo naturaleza.

Atentamente,