El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha advertido del riesgo «inminente y real» de que se produzca una guerra civil en Siria, en vista de que los episodios de violencia en el país parecen lejos de disminuir, y ha señalado que «los terroristas se están aprovechando del caos» existente en el país.

«El pueblo sirio está sangrando», ha dicho tras dirigirse a los países miembro del Consejo de Seguridad a puerta cerrada. «Están furiosos. Quieren paz y dignidad. Ante todo, quieren acción», ha subrayado.

Para el secretario general de la ONU, «nadie puede predecir cómo va a evolucionar la situación en Siria. Debemos estar preparados para cualquier eventualidad; debemos estar preparados para responder a muchos escenarios posibles». Ha avanzado que «a petición del Consejo de Seguridad, presentaré próximamente una variedad de opciones para seguir adelante».

«Depende de los miembros del Consejo de Seguridad encontrar una causa común, pero permitidme que diga que necesitamos una acción rápida. Debemos hablar con una voz, enviar un mensaje claro e inequívoco: la violencia ha de detenerse, por ambas partes. Necesitamos una transición pacífica que cumpla las aspiraciones del pueblo sirio», ha insistido.

El máximo representante de Naciones Unidas ha asegurado que el plan del enviado especial conjunto de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, sigue siendo el centro de los esfuerzos para solucionar la crisis, pero ha matizado que «al mismo tiempo, en vista del deterioro de la situación, sería bueno que hubiera nuevas discusiones a nivel internacional».

Así, ha dicho que la cumbre del G-20 que se celebrará los días 18 y 19 de junio en la localidad mexicana de Los Cabos es una gran oportunidad para debatir la crisis en profundidad.

Elarabi pide aplicar «todo tipo de presión, pero no fuerza militar»

Por su parte, el secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elarabi, ha urgido al Consejo de Segurida de la ONU a «aplicar todo tipo de presión, pero no la fuerza militar» contra el Gobierno sirio.

«El mensaje que he traído conmigo es pedir al Consejo de Seguridad que aplique el artículo 41 de la Carta de la ONU, es decir, todo tipo de presión, pero no el uso de la fuerza, y que se haga ahora», ha manifestado.

Ha recalcado que «ya es suficiente». «La Liga Árabe ha presionado al Gobierno sirio para que detenga los enfrentamientos. No ha pasado nada. Hemos intentado muchas cosas, incluido el despliegue de observadores. No ha pasado nada. Ahora está en manos de Naciones Unidas», ha agregado.