El Consejo de Administración del Centro Internacional de Tabakalera (CICC) acordó, en la reunión celebrada ayer por la tarde, que Ane Rodríguez será quien asuma la dirección cultural del centro. Asimismo, se decidió que Haritz Azkarraga será el encargado de la gerencia del Centro. Las dos personas fueron elegidas por mayoría absoluta, y el Gobierno de Lakua se abstuvo. No quiso tomar parte en la votación, no por los candidatos, sino porque está en desacuerdo con el procedimiento.

El Ejecutivo ya mostró anteriormente su disconformidad con la convocatoria de este concurso, puesto que considera prioritario contar con unos contenidos culturales previos. Primero quería tener un proyecto cultural, y luego elegir a la persona. La Diputación y el Ayuntamiento, por el contrario, defienden que el documento base con el que trabajará Rodríguez será el que elaboró Joxean Muñoz, el anterior director del Centro.

Para las 17.30 numerosos periodistas aguardábamos en la puerta de las oficinas que tiene Tabakalera en la Torre de Atotxa. Al lado, el edificio de la gran fábrica de tabacos de Donostia, que justo el mes que viene hará cien años desde que se inauguró, se encontraba sin tejado y vaciado casi en su totalidad. Las máquinas trabajaban retirando los escombros para después construir.

El ambiente de la espera

Primero escuchamos la voz de Juan Karlos Izagirre y Martín Garitano, que subían por las escaleras hacia la sala donde tendría lugar el consejo. Luego llegaron Antonio Rivera y Blanca Urgell, la directora del Instituto Etxepare Aitzpea Goenaga -en bicicleta-, concejales del Ayuntamiento como Eneko Goia y Nerea Txapartegi, e Ikerne Badiola y Juan Karlos Alduntzin, representantes de la Diputación. Los fotógrafos se marcharon tras tomar las imágenes y los periodistas esperamos en una sala contigua en total silencio, repasando los apuntes como si fuéramos aplicados estudiantes de una biblioteca, puesto que en estas oficinas se escuchaba todo.

Primero salieron el alcalde y el diputado general, casi corriendo, dirección al Palacio Miramar, donde debían de presentar los cursos de verano. Los demás miembros del consejo continuaron con la reunión, que se alargó hasta las 19.30. Todos se fueron sin hacer declaraciones, menos la diputada de Cultura, Ikerne Badiola, que en compañía de Nerea Txapartegi remarcó que el de ayer fue un día importante para Tabakalera, ya que tras una larga pausa dieron luz verde a este proyecto y terminaron el proceso de selección de la directora artística y del gerente. «Al final Tabakalera avanza y queremos mostrar nuestra alegría por ello».

Compromiso económico

Badiola añadió que tenían muchos temas que debatir, como el compromiso económico para los trabajos del año que viene, y que estos se aprobaron por unanimidad. En su día PNV acordó con el Gobierno de Zapatero que este le daría siete millones de euros para las obras del edificio. Zapatero se fue sin cumplir el acuerdo y ahora Rajoy no está por la labor de facilitar ese dinero, por lo que esa ayuda se da por perdida. Lo que hicieron fue acordar pagar entre las tres instituciones del consejo esa cifra, asumiendo cada uno su parte.

Indicaron que las obras de rehabilitación de la fábrica continúan su proceso cumpliendo los plazos previstos.

La presidencia de Tabakalera fue asumida por el alcalde de Donostia Juan Karlos Izagirre, después de que la consejera de cultura Blanca Urgell presentara su renuncia. El vicepresidente es Martin Garitano.