La crisis económica ha centrado el grueso de la intervención de Yolanda Barcina durante el debate sobre el estado de Nafarroa que tiene lugar en el Parlamento.

Al inicio de la sesión, la presidenta ha avanzado que su Ejecutivo va a presentar unos presupuestos para 2013 «excepcionales, para una situación excepcional».

Así, ha detallado que el proyecto de Ley Foral de Presupuestos que planteará será ajustado a una previsión de un descenso del 1,2% del PIB para 2013 y lastrado por una deuda pública que para 2014 ascenderá a 3.906 millones de euros, muy por encima del propio techo de gasto de los presupuestos navarros.

Ha defendido que la Comunidad necesita unas cuentas «realistas y adecuadas a un año tan difícil como va a ser 2013» y ha admitido que necesitará «el mayor respaldo político, económico y social posible para ser eficaces».

Ha expresado su «total disposición» para «mantener la concertación y el consenso» y ha apelado a la «responsabilidad» de los grupos para negociar los presupuestos.

Reforma fiscal

Durante su alocución, Barcina ha apostado por reducir «la estructura y el gasto operativo» de la Administración y reducir de forma progresiva la deuda, y ha anunciado medidas de «impulso y reactivación», dirigidas a la promoción de acceso al crédito y actuaciones en materia de empleo.

En el ámbito fiscal, ha planteado una reforma tributaria y ha citado una lista de medidas que prevén una mayor recaudación, especialmente vía Impuesto de Sociedades, en base a diferentes planteamientos, que afectan a este nuevo Impuesto de Sociedades, al recientemente presentado I Plan de Emprendimiento de Navarra, a la continuidad y mejora del Plan de Lucha contra el Fraude, y a la puesta en marcha de un plan contra la economía sumergida.

La presidenta navarra ha hecho hincapié también en lo que ha considerado «proyectos estratégicos», como el Canal de Navarra, el TAV, el Plan Integrado de residuos 2010-2020, un Campus de FP Público en el territorio y un nuevo cetro de FP de los Salesianos en Egüés.

Elecciones, «no son la solución»

Sobre la posibilidad de adelantar las elecciones, lo ha considerado «inoportuno» porque «no solo no serían la solución sino un problema añadido a la crisis que están sufriendo con especial dureza muchos ciudadanos y empresas de Navarra.Unas elecciones ahora no son una solución a los problemas de los ciudadanos».

Barcina ha augurado que tras unas hipotéticas elecciones anticipadas «probablemente nos encontraríamos en una situación similar a la que ahora tenemos».

Ha añadido que «o el Gobierno consigue recabar apoyos aislados para cada uno de sus proyectos o un bloque tan heterogéneo como el formado por PSN, NaBai, Bildu e IU se une para sacar adelante sus iniciativas», por lo que, a su entender, solo caben dos gobiernos: «uno liderado por UPN u otro dominado por el nacionalismo».