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MANILA

Seis muertos y 54.000 desplazados por el tifón Bopha en Filipinas

El tifón Bopha ha causado seis muertos y el desplazamiento de al menos 54.000 personas a su paso por Filipinas. Además, las escuelas han sido cerradas, 80 vuelos han sido cancelados y el transporte marítimo ha sido suspendido en el país.

Imagen de los desperfectos que ha causado el tifón a su paso por Filipinas. (AFP)
Imagen de los desperfectos que ha causado el tifón a su paso por Filipinas. (AFP)

Seis personas han muerto y al menos 54.000 personas han tenido que ser realojadas en centros de acogida habilitados por las autoridades filipinas a causa del tifón Bopha, que ha tocado suelo en el país con vientos sostenidos de 175 kilómetros por hora y ráfagas de 210 kilómetros por hora, además de copiosas lluvias.

La televisión local ABS-CBN atribuye las seis víctimas mortales a fuentes oficiales de los equipos de rescate sin ofrecer más detalles. No obstante, el presidente del Consejo Nacional de Prevención y Respuesta a los Desastres, Benito Ramos, ha confirmado la muerte de una mujer de 60 años en Davao Oriental aplastada por una palmera que ha sido derrumbada a causa de las ráfagas de viento.

Otra víctima mortal señalada por la Policía es un joven de 22 años que ha fallecido en su casa, también en Davao Oriental.

Horas después de tocar tierra esta mañana en el lado oriental de Filipinas, el tifón había perdido algo de fuerza; los vientos sostenidos han caído a 160 kilómetros por hora.

La mayoría de los evacuados, unas 50.000 personas, son residentes en las provincias más orientales de Mindanao, como Surigao del Norte y del Sur, Agusan del Norte, Lanao del Norte y Misamis Oriental.

Como medida de prevención, las escuelas de la zona han sido cerradas, mientras que unos 80 vuelos han sido cancelados en todo el país y miles de personas se han quedado atrapadas en los puertos a causa de la orden de la guardia costera de que el servicio de transbordadores permanezca suspendido.

Además, los habitantes de las poblaciones costeras y montañosas han sido advertidos del peligro de inundaciones y deslizamientos de tierra. Según la Defensa Civil, se han producido cortes en el suministro eléctrico y las Fuerzas Armadas están preparadas para participar en tareas de rescate o asistencia humanitaria en caso de necesidad.

El presidente del país, Benigno Aquino, remarcó ayer en rueda de prensa la fuerza del tifón y advirtió de que el «potencial destructivo» de Bopha «no es cosa de risa».

Se prevé que el tifón abandone Filipinas este jueves y con ello cerrará la temporada de tifones en el país.