Sin concesiones y a cara de perro. Con ese talante se va a desarrollar un derbi entre Osasuna y Athletic en el que ninguno de los dos va a hacer prisioneros. La situación clasificatoria de ambos, aunque la dinámica y sensaciones sean ahora mismo completamente diferentes en una u otra escuadra, obliga a pensar en una batalla sobre el césped, que no debe extrapolarse a otras zonas, como gradas o la calle, pues el fútbol, aunque muchas veces no lo parezca, no deja de ser un deporte y un entretenimiento.

El lleno que se prevé en El Sadar tiene que invitar únicamente a una fiesta entre aficiones y en la que la rivalidad no ha de pasar más allá de lo estrictamente deportivo. A partir de ahí, la lucha por los puntos va a ser la tónica de un encuentro que, como casi todos los derbis, se presenta con expectación en sus prolegómenos, pero que luego seguramente defraudará en cuanto a fútbol y se resolverá en algún pequeño detalle.

Tampoco es que se pueda esperar mucho más de dos conjuntos para los que, ahora mismo, la prioridad es sumar y dejarse de florituras. Aparte de jugar ante su entregada afición, Osasuna parte con la dinámica de estar subido a una trayectoria positiva, todo lo contrario que el Athletic, pero si en algún partido no sirve nada de eso es en un derbi.

Quien le ponga más intensidad a la hora de afrontar el choque tendrá mucho ganado, aunque ni siquiera llevar la iniciativa garantiza quedarse con los tres puntos. Lo confirma la estadística hasta ahora firmada por ambos equipos. Los rojiblancos generan más ocasiones que sus rivales, pero no las transforman, mientras que los rojillos saben sacar mucho más partido de su menor llegada al área rival.

Seguridad defensiva

Será, además, un envite de rivales con características contrapuestas, especialmente en lo que se refiere a la seguridad defensiva. Los anfitriones, siguiendo el hábito de recientes temporadas, ya encabezan el ranking de más seguros del campeonato -el tercero menos goleado, con 27 en contra, 8 encajados en casa-, mientras que los visitantes son todo lo contario -el segundo más goleado, con 50, casi el doble, en contra, 30 de ellos lejos de San Mamés-.

Aunque siempre es complicado adivinar el once que alineará Mendilibar, el técnico zaldibartarra podría repetir con el trivote que tan buenos resultados le dio en el Ciutat de Valencia el pasado lunes. Eso sí, habría dos cambios obligados, la entrada de Miguel Flaño en el eje de la zaga y la de la Lolo en la medular. Otras opciones pasarían por dar paso a Cejudo o De las Cuevas, con lo que Oier bajaría al centro del campo.

En el caso del Athletic, Bielsa recolocará a San José de nuevo como central -Ekiza entra en la lista, pero apenas ha entrenado entre semana-, todo apunta a que De Marcos ha superado sus molestias y será de la partida e Ibai ocupará la banda izquierda dejada por Iker Muniain.

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