Colectivos y vecinos de Alde Zaharra han puesto en marcha la campaña Santo Domingo Bizirik!, que tiene por objeto apoyar a las doce familias desalojadas la semana pasada y denunciar el abandono institucional en la que se encuentra esta calle, situada en el corazón de Gasteiz, cerca de la Catedral Santa María.

«A nuestro entender, Santo Domingo es una calle muy golosa por su ubicación. Pero para hacerla atractiva a un nuevo vecindario y comercio con ‘más glamour’, esto es, con más dinero y ‘mejor imagen’, tienen que conseguir desertizarla. Es decir que el actual vecindario y comercio la abandone y, construyendo nuevo edificios, atraer una población más pudiente», han señalado Manu Arakama y Laura Abrain.

A su parecer, las instituciones «dejan que los edificios vayan entrando en situación de ruina –cinco han sido declarados en ruina– y otro van camino de estarlo, porque, a pesar de su situación, no conceden ayudas adaptadas a las necesidades del vecindario». «Por eso, de las más de 40 lonjas y locales que tiene la calle, solo cerca de una decena tienen actividad, aunque no sea comercial». han añadido.

Y han alertado de los problemas de convivencia que aquejan a la calle. Han denunciado que el Ayuntamiento está «haciendo una dejación de funciones inadmisible en las cuestiones relativas la intervención técnica para la mediación social con el vecindario conflictivo», y se llevan a cabo «despliegues policiales tan exagerados que no resuelven los conflictos. En ocasiones incluso los provocan o los acentúan».

«Además, se difunde en el resto de la ciudad un sentimiento de miedo ante la imagen de una zona muy conflictiva y peligrosa. Algunos medios de comunicación o periodistas morbosos terminan la labor trasladando la imagen de ‘salvaje oeste’ hacia la calle», han remarcado antes de instar a «todos y todas a hacer un esfuerzo y recuperar esta calle, mediante el trabajo común, la denuncia y la solidaridad entre vecinos».

Así, el primer acto de la nueva campaña tendrá lugar esté sábado a las 13.30 en el número 40 de la calle Santo Domingo, uno de los portales desalojados por el Gobierno local de la capital alavesa, en manos de PNV y PSE. Cabe señalar que los vecinos y vecinas desalojadas han sido reubicadas en tres ocasiones, «violando la intimidad de las personas e impidiendo el desarrollo de una vida normalizada».

«Consideramos que es inadmisible el trato que están recibiendo por parte del Ayuntamiento estas familias. Y exigimos su realojo definitivo e inmediato hasta que se solucionen los problemas de sus casas y puedan volver a ellas», han concluido.