El ministro israelí de Defensa, el ultrasionista Naftali Bennett, ha anunciado este miércoles la transformación de siete zonas de Cisjordania en «reservas naturales» israelíes, en el marco de su política para reforzar la colonización del territorio plaestino.

Bennet ya afirmó la semana pasada que Israel quiere duplicar en la próxima década la población en sus colonias en Cisjordania, hasta alcanzar el millón de colonos en territorio palestino, y defendió que la denominada «zona C» pertenece a Israel.

Los acuerdos de Oslo dividieron Cisjordania en tres zonas, –A, B y C– de las que la última se encuentra bajo el control administrativo y militar total de Israel, si bien las otras dos, de facto, también se encuentran bajo la dominación del ocupante.

«He dado instrucciones para que siete lugares en Judea-Samaria (denominación sionista para Cisjordania) sean reservas naturales» ha señalado Bennet, líder del partido Nueva Derecha.

Según la ONG Paz Ahora, las reservas señaladas suponen unas 5.300 hectáreas de las que el 40% son tierras privadas palestinas. 

Según las leyes israelíes sobre reservas naturales, los palestinos no tendrán derecho de cultivar sus propias tierras «y será más fácil expulsarlos de este territorio», ha señalado Hagit Ofran, uno de los responsables de esta organización.

Este anuncio se inscribe en la política que avanza en la anexión de la zona C de Nueva Derecha, uno de los aliados del primer ministro, Benjamin Netanyahu, que también apoya las reclamaciones de los colonos, más aún durante el último año en el que se han celebrado dos elecciones legislativas y ante las que se han convocado para el próximo marzo.

Ante de los comicios de setiembre, Netanyahu ya prometió anexionar el valle del Jordán, un lugar estratégico en Cisjordania. Según Bennet, las siete nuevas reservas naturales estarán «bajo la responsabilidad de la Dirección de Naturaleza y Parques de Israel». 

El ministro ya había afirmado que se ampliarían las 12 «reservas naturales» que Israel tiene actualmente declaradas en Cisjordania y bajo su control, incluida la de Qumran, donde se descubireron los Manuscritos del mar Muerto entre 1947 y 1956.

El ministerio de Exteriores de la Autoridad Palestina ha condenado el anuncio de Bennet, y lo ha calificado de «expansionista y colonialista».