Cinco años después, el Baskonia va a volver a congelar los precios de los abonos de la próxima temporada 2020-21, además de adquirir el compromiso de devolver dichos importes si prosiguen las restricciones de acceso de público como consecuencia de las medidas sanitarias por el Covid-19.

La medida se aplicará basándose en criterios de «responsabilidad y empatía», ha señalado Mikel Bárcena, responsable del Servicio de Entradas del Grupo Baskonia-Alavés, quien también ha señalado que aquellos abonados que no puedan disfrutar de alguno de los partidos por causas de fuerza mayor contarán con la devolución de la parte proporcional no disfrutada y el propio abonado decidirá la opción más conveniente para destinar esa cantidad, a través del mismo procedimiento de compensación aplicado para la temporada pasada.

El abono dará derecho al seguidor baskonista a disfrutar, como mínimo, de 34 partidos locales, entre Euroliga y ACB. «El abonado solo pagará por lo que disfrute», ha remarcado Bárcena. La renovación del carnet se llevará a cabo de forma automática y quien desee darse de baja o llevar a cabo cualquier otro tipo de modificación deberá comunicarlo antes del 30 de julio.

Por otro lado, el club ha recordado que aquellos abonados que decidieron aplicar el saldo a su favor de la pasada campaña en su nuevo abono lo tendrán incluido automáticamente en la renovación del mismo.

Sufrimiento como motivación

Una frase del entrenador baskonista, Dusko Ivanovic, centrará el mensaje de la campaña de abonados. «Si al sufrimiento le das sentido, es motivación», reza el lema de esta fase de renovación y captación de seguidores, que tiene como imagen principal el reciente trofeo de la Liga Endesa conseguido por el equipo gasteiztarra.

En la actualidad, Baskonia cuenta con 10.084 abonados, si bien no se han marcado unas cifras para la próxima campaña, debido a la incertidumbre que genera la pandemia. En cambio, han asegurado que el Buesa Arena tendrá «todas las medidas de seguridad y sanitarias» exigidas por las autoridades cuando comiencen los partidos abiertos al público y han apuntado que, en caso de restricciones de aforo, «tendrán prioridad los abonados». «Cumpliremos lo que nos marquen las autoridades», ha remarcado Bárcena.