Martxelo Diaz eta Aritz Intxusta Blog
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Apología del franquismo

Martxelo Díaz

No han tenido tanto eco como las declaraciones de Mariló Montero sobre el alma de los órganos, cargándose años de políticas de fomento de las donaciones, pero el artículo del senador del PP por Nafarroa José Ignacio Palacios haciendo apología de la laureada franquista también tiene lo suyo.

El que fuera consejero de Obras Públicas de Nafarroa, polémico, no ha tenido mejor ocurrencia que defender la colocación de la laureada en el escudo del herrialde. Y no lo hace por desconocimiento, ya que él mismo recuerda en su artículo que la distinción fue otorgada por los rebeldes franquistas en noviembre de 1937 para premiar la aportación de los fascistas locales al golpe de Estado. Es decir, en plena guerra y por parte de un grupo de alzados en armas contra la legalidad republicana. Palacios subraya el alto porcentaje de voluntarios navarros en las filas fascistas. No cita que su actuación provocó más de 3.000 fusilados en las cunetas navarras ni que muchos cuerpos no han sido recuperados 75 años después. También cita como« méritos», orgulloso, "la Campaña del Norte", el ataque fascista contra Gipuzkoa y Bizkaia, con hechos tan «destacados» como el bombardeo de Gernika, el de Durango, el asedio a Irun, Intxorta....

Las palabras de Palacios son claramente una apología del franquismo. Palacios sabrá (o debería saber) que la Ley de Símbolos de Nafarroa, en su disposición transitorio única, ordena la retirada de la simbologia franquista. También es verdad que da un plazo para ello y aunque hayan pasado nueve se siguen haciendo misas franquistas en Los Caídos.

Por cierto, es la misma Ley de Símbolos que se emplea para sancionar a los ayuntamientos navarros que colocan la ikurriña. Parece que es más grave colocar la bandera nacional que hacer apología del franquismo.

Quizá Eloy Villanueva debería pedir la misma contundencia contra Palacios que contra los ayuntamientos que colocan la ikurriña, a quienes quiere chantajear con el reparto de los fondos públicos. Santiago Cervera, desde Madrid y por Twitter, ya ha dicho que pasa del tema.

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