2025 URR. 10 - 06:00h Elkarrizketa Antonio Arias Cantante y bajista de Lagartija Nick «La motivación debe estar en cada proyecto que afrontas» Lagartija Nick regresan a Euskal Herria para presentar ‘Eternamente en vivo’, doce canciones en directo en el que repasan un repertorio de más de 35 años, que también sirve para comprobar el estado actual de la banda granadina y para disfrutar de himnos míticos en un nuevo formato. Miembros de Lagartija Nick. (Antonio OLMEDO) Sergio Iglesias {{^data.noClicksRemaining}} Artikulu hau irakurtzeko erregistratu doan edo harpidetu Dagoeneko erregistratuta edo harpideduna? Saioa hasi ERREGISTRATU IRAKURTZEKO {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Klikik gabe gelditu zara Harpidetu {{/data.noClicksRemaining}} Para comenzar, ¿por qué un disco directo a estas alturas? En nuestro caso era una asignatura pendiente, porque Lagartija Nick siempre hemos tenido un directo impactante y muy explosivo, pero cada vez que contábamos con presupuesto, lo destinábamos a ideas nuevas que nos mantenían vivos. Y la verdad es que nos arrepentimos mucho de no haber grabado más conciertos de la gira del 35 aniversario, porque veíamos que el grupo tenía un sonido muy peculiar. Las grabaciones de la película ‘Generación Lagartija’ también nos sorprendieron, y por eso la idea de este disco surge de la convicción de que nos encontramos en un momento en el que sonamos muy bien en directo, y además queríamos reflejar el espíritu de revisión y aportación que tuvo el repertorio de aquella gira. ¿Cree que la esencia de la banda está en el directo aunque, sobre todo en los últimos tiempos, siempre han hecho discos conceptuales y complejos que exigen un gran esfuerzo? Como dices, veníamos de una serie de discos conceptuales con un desarrollo escénico muy ligado a esos álbumes. Pero en esta gira, poder jugar con todo nuestro repertorio le daba otra expresión a lo que hacemos: era una celebración, un recorrido ecléctico que reflejaba todo lo que somos y daba una nueva dimensión a la historia del grupo, contada en vivo. Aunque los discos tienen una elaboración propia, es bonito encontrar en el directo el punto en el que esas canciones siguen vivas. «Poder jugar con todo nuestro repertorio le daba otra expresión a lo que hacemos: era una celebración, un recorrido ecléctico que reflejaba todo lo que somos» ‘Eternamente en vivo’, como no podía ser de otra manera, se registró en sendos conciertos en Granada. ¿Cómo recuerda aquellos días? Fueron dos días muy importantes, porque no habíamos grabado ningún concierto de la gira y en Granada hicimos una apuesta muy fuerte. Recuerdo perfectamente esa sensación de que era ‘la hora de la verdad’ y no se podía fallar. ¿Ha costado quedarse solo con doce temas de un repertorio tan extenso? Sí, pero la idea de hacerlo en un solo disco nos recordaba a aquellos directos sencillos, como ‘Live at the Harlem Square Club, 1963’ de Sam Cooke o ‘Still Life’ de los Rolling Stones. Hay algo mágico en sintetizar un concierto en un único disco, y también queríamos reflejar algo de cada época en doce canciones. Curiosamente, al hacerlo nos dimos cuenta de que habíamos incluido más temas de ciertos discos, como ‘Su’, pero aun así, fue relativamente sencillo mantener esa idea de compilación. Y como una de las grandes sorpresas, nos encontramos temas como ‘Fulcanelli’, que creo que hacía años que no tocaban… Sí, la hemos tocado muy pocas veces, aunque en el local sí que sonaba bastante. En esta gira jugamos con la parte divertida tanto del disco como del directo, y ‘Fulcanelli’, con ese aire Pink Floyd que aporta JJ [Machuca] en los teclados, crea un contraste en el descenso emocional entre montañas, que es este directo. Como digo en el concierto: ‘Esta no os la esperabais, ¿eh?’… pero es que fue una sorpresa incluso para nosotros. Además de crear una dinámica especial en el álbum, fue como un juego privado que quisimos compartir con el público esa noche. Lagartija Nick, en concierto. (Antonio OLMEDO) Hablando de JJ Machuca, qué importante es su labor en el sonido actual de la banda, ¿verdad? Claro. Eric, Juan y yo llevamos juntos desde los 80, pero la incorporación de teclados y samplers ha cobrado mucha fuerza en los últimos discos. Y había un reto, que era integrar todo eso en el repertorio antiguo. A veces, los teclados funcionan como otra guitarra, otras veces como una voz solista, y la aportación de JJ se nota tanto en las canciones que ya hemos creado con él, como en las anteriores, en las que no participó. Sus teclados han aportado una limpieza sonora dentro de la ‘suciedad’ que caracteriza nuestro sonido actual, generando espacio y equilibrio para que no resulte abrumador.Pero, a la vez, sí que es abrumador cómo ese sonido lo llena todo en los conciertos. ¿Puede que sea lo más destacable para los y las que ya les habíamos visto en muchas giras a lo largo de los años? Sí, es como volver a escuchar los discos y sentir sensaciones distintas. No me había dado cuenta, pero es cierto que ese sonido sorprende a quienes ya conocen nuestro repertorio, y les ofrece una escucha nueva. Lagartija siempre hemos buscado nuestra razón de ser afrontando retos, y en este caso, nuestra razón de existir ha sido mirarnos de nuevo desde ese nuevo sonido. JJ empezó conmigo en ‘Multiversos’, aunque también había participado en ‘La guerra de los mundos’. Siempre ha estado orbitando cerca de la banda, y con ese punto de vista externo ha sabido incorporarse de una manera absolutamente brillante. ¿Cree que se ha conseguido captar en este disco la esencia de Lagartija Nick tras más de 35 años? Yo creo que sí. Es un repertorio muy complejo, con una puesta en escena también compleja, y mezclarlo en ese tipo de ‘akelarre’ nos permitió recuperar los espíritus de mi hermano Jesús haciendo ‘Agonía, agonía’, o a Morente con ‘Niña ahogada en el pozo’, que tanto me recuerda a los primeros pasos de la creación de ‘Omega’.La intención era dignificar nuestra carrera y expresarla de una manera sencilla, y yo pienso que se ha conseguido. ¿Con qué época de la banda se quedaría, si tuviera que elegir una? Todas han dado sentido al grupo. Siempre hemos tenido una razón de ser a través de desafíos y proyectos que nos hacían sentir vivos. Y curiosamente, como decíamos antes, esta vez parece que nos hemos centrado mucho en la época de ‘Su’, que representa una parte muy importante de nuestra historia, con ese cambio de sonido y visión justo antes de ‘Omega’. Pero como te digo, todas las épocas son necesarias para entender lo que es Lagartija Nick. «Lagartija siempre hemos buscado nuestra razón de ser afrontando retos, y en este caso, nuestra razón de existir ha sido mirarnos de nuevo desde ese nuevo sonido» ¿Qué sorpresas habrá en estos conciertos para quienes ya les vimos en la gira del 35 aniversario? Buena pregunta. Estos conciertos tienen un poco esa invocación de ‘Última llamada’ para la gente que quiera volver a ver en directo esta recopilación con nuestro sonido actual. Hemos estado mucho tiempo con la gira, recuperamos mucho material y, por supuesto, habrá cosas nuevas, porque se quedaron fuera muchas canciones que habíamos ensayado, y ahora tenemos la oportunidad de aprovechar este disco para sacar cosas que nos importan o que queremos fijar para que el público las aprecie. Pero me lo apunto, y muchas gracias, porque todavía hay que prepararlo (risas). Para terminar, supongo que ya habrá proyectos nuevos a la vista, para cuando finalicen esta gira ¿no? Sí. Nos tomaremos un descanso de este repertorio y pensaremos qué coño vamos a hacer, porque el año que viene también es el 30 aniversario de ‘Omega’, y probablemente vayamos por ahí. Además, yo también quiero editar la música gnawa que he grabado en diferentes lugares y que estoy desarrollando con mi grupo Mawlid. Es un proyecto muy especial, porque la música gnawa busca la piedra filosofal de la música, su esencia… de ahí viene el blues, la psicodelia y muchas cosas más; y tiene esa connotación ancestral de búsqueda interior. Trabajar con grandes maestros del género en Marruecos ha sido un auténtico lujo. Siempre digo que no sé si me dará tiempo en esta vida a sacar todo lo que tengo (risas), pero volver a descubrir la música a través de nuevas experiencias es una necesidad para cualquier músico. La motivación debe estar en cada proyecto que afrontas. Y en nuestro caso, la banda sabe cuándo una propuesta tiene ese punto de expresión genuina. En ese sentido, este disco en directo muestra incluso el estado de nuestra relación personal; hemos pasado por muchas cosas juntos y ese punto de celebración también trasciende el álbum. Todavía me quedo flipado con cómo suena ‘Conmigo crece el caos’… esas manos de Eric, ¡es algo realmente impresionante!