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MOTOR

Volkswagen Golf GLD MK1(1980)


En el encuentro de coches clásicos celebrado en Azkoitia el pasado día 8 de mayo tuvimos la oportunidad de contemplar la primera generación (MK1) de uno de los vehículos más populares de todos los tiempos, el Volkswagen Golf, lanzado en marzo de 1974 y del que se han creado siete generaciones distintas, con más de 30 millones de unidades comercializadas.

En su lanzamiento, supuso una auténtica revolución, ya que hasta entonces dominaban la escena los motores montados detrás con tracción trasera, como el Beetle, mientras el Golf llegaba con un motor frontal montado transversalmente y con tracción delantera.

En cuanto a diseño, se trataba de un modelo compacto y sencillo desarrollado por Giugiario con carrocería hatchback, es decir, dos volúmenes con portón trasero en lugar de maletero separado, que pronto fue imitado por el resto de los fabricantes, dando lugar a modelos como el Ford Escort, el Opel Kadett, el Lancia Delta, el Toyota Corolla o el Honda Civic.

El Golf MK1 montaba una suspensión McPherson, lo que proporcionaba una muy buena calidad de marcha y una estabilidad en curva excelente.

La oferta mecánica del primer Golf se componía de dos versiones gasolina de 1,1 y 1,5 litros, de 50 y 70 CV, respectivamente, ambos de cuatro cilindros en línea refrigerados por agua y alimentados por carburador.

Pero el verdadero motor que revolucionó el mercado fue el diésel, un 1.5 de 50 caballos lanzado en 1975, que sorprendió en todos los países en los que se comercializó por su bajo consumo, gracias fundamentalmente a su baja cilindrada para aquella época y a que era la primera vez que este tipo de motores se montaba en un coche compacto. A partir de entonces, la mayoría de fabricantes comenzó también a incorporar esta oferta mecánica en sus modelos compactos.

Desde 1980, este motor fue reemplazado por un bloque ligeramente mayor, de 1,6 litros, con una potencia de 54 caballos, y en 1982 apareció una variante con turbocompresor que desarrollaba una potencia de 70 CV.

Una de estas versiones es precisamente la que llevó a Azkoitia el tolosarra Javier Perurena, quien nos explica que se trata de un Golf GLD de 1980, pero al que le fue reemplazado el motor por uno sobrealimentado.

Pero al margen de ello, lo más llamativo de este coche es que lo conserva su familia desde el comienzo, es decir, lleva con ellos nada menos que 36 años, incluso luce la matrícula original navarra.

«Lo compró nuestro padre en el año 1980 y fue el coche que utilizábamos en casa de forma habitual, hasta que se le rompió el motor. Entonces lo restauré, le puse un motor con turbo y ahora lo utilizo yo, para salir algunos fines de semana, pero también para un uso diario», explica Perurena, un gran aficionado a los coches clásicos, pues además del Golf tiene otros dos Volkswagen, un Corrado y un Golf GTI, así como un Peugeot 205 GTI.

El Golf MK1 lo conserva en estado totalmente original, aunque para la concentración de Azkoitia le calzó unas llantas Ultralite de 13 pulgadas con medida 175/70 , que se utilizaban como extra en modelos de aquella época.

En cuanto a su mantenimiento, Javier Perurena asegura que no es nada costoso y que, quizás, lo que más cueste sea conseguir las piezas de recambio. «Tienes que moverte mucho, en ferias, en desguaces, por internet, o incluso pidiéndolas a Alemania. Ahora hay empresas dedicadas a la fabricación de piezas para clásicos, pero tienes que esperar mucho, ya que no comienzan a fabricarlas hasta que reúnen un mínimo de pedidos», explica.

En cuanto al coste de las piezas, señala que no son muy caras, pero que si hay escasez, el precio sube considerablemente. «A este coche, por ejemplo, le quería cambiar los pilotos y, pidiéndolos a la casa, me salían por 90 euros, mientras que en Madrid me pedían por ellos 300 euros, tres veces más».

Pero estas pequeñas dificultades no hacen echarse atrás a estos grandes aficionados de los coches clásicos para quienes su pasión no es más que un pasatiempo con el que disfrutan ellos y, además, hacen disfrutar a quienes se acercan a este tipo de encuentros.

 

El Citroën Berlingo cumple veinte años.

Parece que fue ayer, pero ya han pasado veinte años desde que Citroën lanzase su primer Berlingo (en la imagen), un vehículo que marcó un antes y un después en el segmento de los comerciales al ser diseñado como un modelo independiente y no como un derivado de un turismo. Para celebrar esta efeméride, se ha lanzado la edición “20 aniversario”, que se acerca al universo de los SUV con una suspensión sobreelevada, además de barras de techo y protecciones bajo el motor. Dispondrá de una gama de tres motores, uno gasolina de 110 CV y dos diésel HDI de 100 y 120 CV.

 

El Peugeot 108 podrá disponer de carrocería bitono e interior amarillo.

El Peugeot 108, el modelo más urbano de la marca francesa, ofrece la posibilidad de elegir entre cuatro opciones de carrocería bitono y un interior amarillo «que marca tendencia», según afirma el fabricante. Además, este modelo ofrece la posibilidad de crear un coche exclusivo, gracias a siete «universos de personalización». Estará disponible en versiones de 3 y 5 puertas y con el techo descapotable. La versión 1.2 de 82 caballos de potencia podrá adquirirse por 108 euros al mes, pagando una entrada de 2.285 euros y financiándolo a 72 meses.

 

BMW lanza la roadster G 310 R por 4.950 euros.

BMW lanzará después del verano la monocilíndrica G 310 R, que incorpora la esencia del segmento roadster a esta nueva cilindrada con el fin de ofrecer todo el dinamismo y el confort que se necesita para conducir en el tráfico urbano y en las carreteras. Incorpora un motor de 34 CV refrigerado por agua, cuadro de tubos de acero, horquilla telescópica invertida y frenos de alto rendimiento con ABS, entre otros elementos. Su desarrollo se ha realizado en Múnich, a cargo de BMW Motorrad, y se fabricará en India, en la planta de TVS Motor Company con la que coopera BMW. Se lanzará en octubre con un precio de partida de 4.950 euros

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