Los diputados de Amaiur Maite Aristegi y Rafa Larreina han ofrecido una rueda de prensa en Donostia en la que han señalado que a estas últimas medidas aprobadas por el Ejecutivo de Mariano Rajoy hay que añadirles «los recortes de enero, los presupuestos de marzo, y los recortes en materia de salud y educación».

Larreina ha destacado que las medidas adoptadas por el PP afectan «únicamente a la clase trabajadora», pero ninguna de ellas lo hace de manera directa «a las clases pudientes, y mucho menos, a los sectores que han originado esta crisis y a los que se han lucrado con ella».

«Esto es un escándalo», ha remarcado Larreina, quien, en relación a las medidas en materia energética, ha querido alertar que las mismas repercutirán en los consumidores porque «las eléctricas van a repercutir la subida en los consumidores y, además, se va a castigar a las energías renovables».

Para la coalición soberanista, las medidas adoptadas evidencian «una vez más el carácter cínico y mentiroso de un Gobierno sumiso ante la banca y las grandes corporaciones financieras». Por el contrario, el PP «actúa de manera despótica y arrogante con las gentes de a pie, con las comunidades autónomas y los poderes locales».

Asimismo, han denunciado que se trata de «una clara imposición antidemocrática a Euskal Herria, donde el PP y UPN, tan solo representan a poco más del 20 por ciento de la población» y ha criticado que el partido de Rajoy «ha apostado de manera firme por la recentralización del Estado».

«Pretende, además, imponer un modelo económico y social ajeno a la realidad socioeconómica de Euskal Herria, donde no tenga cabida el estado de bienestar. Cada día, nos acercamos más a una sociedad bipolar: los ricos más ricos, y los pobres serán cada vez más y más pobres. Desde un punto de vista soberanista y de izquierdas, esto es inaceptable. Y desde luego, que tengan claro en Madrid: nos tendrán en frente», han subrayado.

Por todo ello, Amaiur ha exigido un marco soberano en materia económica y financiera «por razones democráticas, económicas y sociales» ya que, en su opinión, «Euskal Herria debe ser dueño de sí mismo y de su futuro y solamente así se podrá dar una salida alternativa a la crisis y avanzar en la construcción de una sociedad más justa y solidaria».