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LONDRES

La Fiscalía británica insta a la Audiencia Nacional a retirar la orden contra Antton Troitiño

La Fiscalía de Gran Bretaña ha sugerido a la Audiencia Nacional española que retire la orden de busca y captura emitida contra Antton Troitiño o que le deje en libertad provisional a la espera de que la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre la ‘doctrina Parot’ sea firme.

Comparecencia de familiares de Antton Troitiño y vecinos de Intxaurrondo en abril de 2011 tras la salida de prisión de Troitiño. (Jon URBE/ARGAZKI PRESS)
Comparecencia de familiares de Antton Troitiño y vecinos de Intxaurrondo en abril de 2011 tras la salida de prisión de Troitiño. (Jon URBE/ARGAZKI PRESS)

El Ministerio Público británico ha preguntado a la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional española la orden de busca y captura contra Antton Troitiño se reclama en aplicación de la ‘doctrina Parot’ y, en ese caso, si afecta la reciente resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) que ordenaba la excarcelación de Inés del Río al estimar que se le aplicó esa medida de forma «irregular».

Además, también se ha interesado por la actitud que adoptarán las autoridades españolas al respecto y si presentarán recurso contra la resolución del tribunal europeo.

De esta forma, la Fiscalía británica propone dos opciones a la Audiencia Nacional: la primera de ellas, que deje sin efecto la orden de detención emitida contra el ciudadano vasco.

La otra es que, aunque el Gobierno español recurra la sentencia del TEDH, decrete la libertad provisional de Troitiño a la espera de que dicha sentencia adquiera carácter de firmeza.

Antton Troitiño fue arrestado junto a Iñaki Lerin el pasado 29 de junio en Londres y posteriormente encarcelados.

El vecino de Intxaurrondo abandonó el 13 de abril de 2011 la prisión de Huelva, tras haber pasado 24 años encarcelado. Desde el mismo momento de su liberación, fue objeto de una campaña política y mediática que tenía por objeto su vuelta a prisión.

Así, apenas una semana más tarde, el día 20, el mismo tribunal que había ordenado su puesta en libertad, la Audiencia Nacional española, ordenó su busca y captura. Para entonces Troitiño se encontraba ya en paradero desconocido.