En declaraciones a Europa Press, fuentes de los sindicatos ELA y LAB han denunciado que la dirección del Grupo Alfa está renegociando su deuda con las diferentes entidades «a espaldas de los trabajadores y sus representantes legales» cuando el objetivo de la negociación son «sus puestos de trabajo y sus derechos» y están utilizando los mismos «como moneda de cambio para negociar con la banca».

De este modo, han indicado que la manifestación, en la que han participado decenas de personas, ha transcurrido con «normalidad» desde Ermua hasta Eibar, hasta el momento en el que varios trabajadores se han encadenado «de forma pacífica» en la sede de Kutxa, para denunciar la actitud que mantiene esa entidad, junto con otras doce cajas, en el conflicto laboral, que sigue a día de hoy, en el Grupo Alfa. La Ertzaintza ha procedido a identificarlos y desalojarlos y, posteriormete, los trabajadores han decidido seguir con la manifestación.

Asimismo, han señalado que, con esta movilización, han querido denunciar la actitud que mantiene Kutxabank y las otras doce cajas que cooperan con el Grupo Alfa, ya que a su entender «gracias a la mala gestión de la dirección, la empresa acumula una deuda de unos 115 millones de euros y el 70% de dicha deuda corresponde a diferentes entidades bancarias, siendo Kutxabank el mayor de sus acreedores».

A su juicio, Kutxabank y otras entidades financieras están poniendo sus condiciones encima de la mesa para seguir financiando la actividad del Grupo Alfa y estas condiciones «no son más que destrucción de empleo y reducciones salariales».

Mantenimiento del empleo

Por otro lado, han reivindicado el mantenimiento del empleo, a la vez de «la búsqueda de viabilidad al conjunto de las entidades del Grupo que no supongan la extinción traumática de puestos de trabajo, ni la modificación sustancial de esas condiciones, ni las bajadas de salarios, ni los despidos».

En esta línea, consideran que ante esta situación «habrá responsables» que «probablemente sean fácilmente identificables, pero en ningún caso son trabajadores del colectivo».

En este momento el Grupo Alfa se encuentra en situación de concurso de acreedores y la dirección quiere despedir a 87 trabajadores en Eibar y Mallabia. Además, la dirección ha manifestado que va a presentar EREs de extinción en todas las plantas. A los trabajadores de Eibar ya se les ha reducido el salario en un 10% y la dirección ha iniciado trámites legales para realizar más bajadas salariales.

Para los trabajadores, «el único objetivo» de Kutxabank y las otras entidades que operan con el Grupo Alfa es «garantizar el cobro de la deuda y para ello están exigiendo a la dirección que realice despidos y ajustes salariales». Por ello, denuncian «la alianza criminal y despiadada de la banca y patronal».

Finalmente, han enviado un «mensaje claro» a los responsables políticos de Kutxabank, a los que han señalado que «si de verdad están a favor del desarrollo económico y la no destrucción de empleo en este país, que tomen las medidas oportunas para dejar de actuar contra los intereses del colectivo de trabajadores del Grupo Alfa y reconducir este conflicto laboral a la senda de la negociación y el entendimiento».