El vicesecretario del Ministerio de Exteriores gazací, Ghazi Hamad, ha explicado que la formación islamista «no quiere que existan túneles porque suponen una carga para los ciudadanos y causan centenares de víctimas», si bien ha manifestado que «son esenciales, ya que no hay alternativa».
«El problema de los túneles podría solucionarse encontrando una vía que equilibre las necesidades de seguridad de Egipto y las necesidades a nivel de ayuda humanitaria de la Franja de Gaza a través de transacciones comerciales legales monitorizadas por ambas partes», ha agregado.
Los túneles clandestinos son vitales para los habitantes de la Franja de Gaza, ya que a través de ellos llegan los productos retenidos por el bloqueo israelí sobre el territorio palestino y por las restricciones egipcias en el paso fronterizo de Rafah.
Decenas de túneles han sido destruidos desde el pasado agosto, en respuesta a la muerte de al menos 16 militares en varios ataques perpetrados cerca de la Franja de Gaza.