El británico Mark Cavendish se ha impuesto en un cerrado sprint con el que ha acabado la quinta etapa del Tour, por delante del noruego Edvald Boasson Hagen, mientras que el australiano Simon Gerrans mantiene el maillot de líder.

Se trata del primer triunfo de Cavendish en esta edición del Tour y el número 24 de su carrera en la ronda francesa.

El ciclista británico se ha impuesto en el primer sprint que ha podido disputar, después de que las caídas o los puertos le hayan privado de los que ha habido hasta el momento.

Cavendish, que en los últimos días aseguraba que arrastraba problemas pulmonares, ha demostrado que sigue siendo el más rápido del pelotón y se ha sacado la espina de la víspera, en la que su equipo, el Omega, se quedó a 75 centésimas de la victoria en la contrarreloj por equipos.

Con este triunfo, el británico se queda a una victoria en el Tour del francés André Leducq, a cuatro de Bernard Hinault y a diez del belga Eddy Merckx, el hombre que más logró en la ronda francesa.

Por detrás ha entrado, contra pronóstico, el noruego Boasson Hagen, del equipo Sky del favorito Chris Froome, mientras que el tercer puesto ha sido para Sagan, del Cannondale, al que se le escapa la victoria.

El eslovaco ha sido segundo en dos ocasiones, lo que le permite mantener el maillot verde de la regularidad.

La llegada agrupada ha impedido cambios en la general, liderada por segundo día por el australiano Gerrans, del Orica, ganador de la contrarreloj por equipos de la víspera, por delante de dos compañero de equipo, el sudafricano Daryl Impey y el suizo Michael Albasini.

Entre los favoritos, Froome es el mejor situado, en el puesto 7, con seis segundos de renta sobre Alberto Contador.

La jornada ha estado marcada por una escapada que se ha formado al inicio de la etapa, una fuga exótica, que ha contado en su presencia con el único japonés del pelotón, Yukiya Arashiro, y uno de los dos negros, Kévin Reza.

Además de esos dos ciclistas, ambos del Europcar, figuraba entre los fugados Romain Sicard, del Euskaltel. Junto a ellos están el kazako de Astana Alexey Lutsenko, el belga del Vacansoleil Thomas de Gendt y el francés del Sojasun Anthony Delaplace.

La escapada se ha formado nada más lanzarse la etapa en Cagnes-sur-Mer y ha llegado a contar con casi 13 minutos de ventaja cuando se habían recorrido 37 kilómetros de camino a la meta de Marsella, situada a 228,5.

El equipo australiano Orica, de Gerrans, ha comenzado a asumir sus responsabilidades de control la fuga se ha ido descomponiendo, hasta que se han quedado solos en cabeza Reza y Lutsenko, que han sido absorbidos por el pelotón a falta de 5 kilómetros.

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