Ocho días y 356 kilómetros más tarde, la marcha ciclista contra el tren de alta velocidad ha llegado a su fin en Donostia tras haber recorrido numerosos puntos de Hego Euskal Herria.
Según han explicado, durante esta marcha han constatado la «eficacia y el poder» de la desobediencia para luchar contra el TAV. Por ejemplo, se han colado en las obras sin permiso, han accedido a los trenes sin pagar o utilizando las grúas para airear las reivindicaciones.
De esta manera, han conocido más de primera mano los efectos del TAV tanto en los terrenos afectados como en las personas que luchan por recuperar la tierra expropiada.
Por lo tanto, han insistido en la necesidad de poner fin a este macroproyecto, para lo cual han reafirmado que la desobediencia es el mejor camino.
_copia.jpg)
Irauli ekimena: Euskal Herriko familia euskaldunen korapiloak askatzeko topagune berria
Localizada la joven de 23 años desaparecida desde el día 25 en Donostia

El primer festival Aske pone la banda sonora a una Euskal Herria libre

La Ertzaintza deja impune la desaparición del test de drogas del hijo de un jefe policial

