Iñaki IRIONDO GASTEIZ

Ligereza del juez Velasco: Enparantza tenía autorización para viajar a París

El pasado lunes, en el auto de prisión para los ocho miembros de la interlocución del EPPK con partidos y agentes sociales, el juez Eloy Velasco incluía una acusación contra Jon Enparantza, la aparición en el registro de un billete de tren a París «picado por el revisor en el trayecto» que, a su entender, le permitía decir que el acusado «es capaz de desobedecer» la prohibición de salir del Estado español, «sustrayéndose temporalmente de la acción de la justicia». Se trata de un detalle no menor cuando entre las justificaciones del encarcelamiento se encuentra la sospecha de que los imputados puedan huir en caso de ser puestos en libertad.

Pero esta acusación de Velasco lo único que demuestra es la ligereza con la que está construida esta causa, puesto que si se hubiera molestado en comprobar los datos en la propia Audiencia Nacional, habría sabido que el Juzgado Central de Instrucción número 3, cuyo titular es Javier Gómez Bermúdez, había autorizado a Jon Enparantza a viajar a París en esas fechas, para asistir como abogado defensor en un juicio.

El Juzgado nº 3 ya lo sabía

En su auto, el juez Eloy Velasco detalla «la aparición del billete del SCNT a nombre del Sr. Emparantza con fecha 20/11/13 con itinerario París-Hendaya, usado 15 minutos antes del inicio del horario de salida y picado por interventor en el transcurso del viaje».

En opinión del magistrado, este viaje, realizado a pesar de «su prohibición de salir del territorio nacional», acordada por el Juzgado número 3 de la Audiencia Nacional tras su anterior detención por «el llamado caso H(ALBOKA)», demuestra que «el imputado es capaz de desobedecerla sustrayéndose temporalmente a la acción de la justicia española».

Velasco determinó que se pusiera este viaje en conocimiento del JCI número 3 «por si ello constituyeran una infracción de sus obligaciones» acordadas en el auto de libertad condicional.

Pero el caso es que el Juzgado de Instrucción número 3, que dirige Javier Gómez Bermúdez, no solo conoce el viaje de Jon Enparantza, sino que fue él mismo quién le autorizó desplazarse a París entre «los días 10 de octubre y 16 de diciembre de 2013, ambos inclusive». El letrado había solicitado la autorización «al objeto de asistir como abogado defensor en los procedimientos y vistas a celebrar en el TGI de París» en las referidas fechas y la Audiencia Nacional lo consideró «proporcional». No había en ese viaje, por tanto, ninguna demostración de desobediencia, como pretende Eloy Velasco.

Citaciones para hoy

Por otra parte, el juez Eloy Velasco citó para hoy a las 12 horas en la Audiencia Nacional a Naia Zurriarain, para «explicar la introducción de un canuto o rulo con instrucciones de la ETA (sic) al interno en la CP Sevilla II Asier Arzalluz Goñi».

También cita a quienes consideren que entre los efectos ocupados en los registros pueda haber documentos suyos y de defensa de otros presos, para que los identifiquen para evitar incorporar en esta causa documentos que involucren el derecho a la defensa de terceros. Caber recordar que el registro incluyó despachos de abogados que no están en esta causa.

«El objetivo de señalar a López de Luzuriaga es ahogar el trabajo de Etxerat»

Decenas de miembros de Etxerat comparecieron ayer en Donostia con el objetivo principal de denunciar la «criminalización» que la asociación está padeciendo durante los últimos meses «por el trabajo que realizamos: la defensa de los derechos de los presos tanto como la de sus familiares y allegados».

Fueron Urtzi Errazkin y la propia Nagore López de Luzuriaga quienes tomaron la palabra durante la comparecencia, ésta última en castellano. Puso como ejemplo de la mencionada criminalización el hecho de que en el operativo «político policial» desarrollado el pasado miércoles una de las portavoces de Etxerat -en referencia a ella misma- «aparecía claramente señalada». Ante ello, señaló que el objetivo de la misma «nos parece claramente definido: denigrar y ahogar el trabajo que Etxerat está llevando adelante»

«Nagore es solamente una más de las familiares que integramos Etxerat, que está formada por personas de diferentes sensibilidades y distintas ideologías. En ningún momento hemos elegido la condición que nos hace ser parte de esta asociación», remarcó.

Sin embargó, afirmó que seguirán trabajando y que lo harán como siempre lo han hecho, «de forma totalmente pública y abierta». Al respecto, subrayó que la apuesta de la asociación es el compromiso que hizo realidad la movilización del pasado sábado en Bilbo. En ese sentido, creyó «necesario y urgente» desactivar la actual política penitenciaria e invalidar el marco «que hace posible la vulneración de derechos» de los presos y presas vascas. Aimar ETXEBERRIA