El último comunicado de ETA, en el que se anuncian aportaciones significativas al proceso en breve lazo, fue valorado ayer por la práctica totalidad de partidos e instituciones, también por el lehendakari, que se refirió a su contenido para calificarlo de «retórica» frente a la que pidió «hechos». Iñigo Urkullu, en la misma semana en que se ha reunido con Mariano Rajoy y como respuesta al compromiso de ETA con una vía vasca por la solución frente al bloqueo de los estados, se valió de su cuenta de facebook para asegurar que tanto la sociedad vasca como su Gabinete «esperamos un compromiso inmediato de desarme».

Horas antes, el portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, había aventurado que el comunicado es «la antesala de lo que puede ser la explicitación de los pasos que ETA como organización está dispuesta a dar en orden al desarme, decomiso o terminar con las estructuras militares». El burukide, asimismo, destacó el anuncio de «aportaciones significativas», así como que ETA se dirija a la comisión creada de mano del foro social.

«La comisión está a la espera y el conjunto de las formaciones políticas también, ya que no existe una verificación directamente ligada a las instituciones del Estado en orden a certificar ese cese definitivo», apostilló en una tertulia de Radio Euskadi, antes de añadir que «bajar la persiana» de una organización así «no es nada sencillo».

El portavoz jeltzale, frente al mensaje unidireccional de Urkullu, también advirtió que el Gobierno español «tenía y tiene una responsabilidad intransferible, que es la de verificar esa situación» y que, sin embargo, «no lo ha querido hacer».

Y si el PNV parece a la expectativa, a ver en qué se concretan esos pasos, desde EH Bildu hicieron hincapié en la disposición mostrada por la organización vasca. Juanjo Agirrezabala, miembro de la Mesa del Parlamento de Gasteiz en representación de la coalición soberanista, opinó en la misma tertulia radiofónica que el comunicado pone de manifiesto que ETA mantiene su voluntad de «seguir dando pasos y avanzar hacia un escenario de paz». Por ello, hizo una lectura «positiva» del documento.

«Clamor» a favor de avanzar

A juicio de Agirrezabala es evidente que hay sectores que se están moviendo y otros que no lo están haciendo y, en concreto, se refirió al «inmovilismo» del PP, que «no quiere avanzar en una resolución definitiva del conflicto». Frente a la cerrazón del partido gobernante en Madrid, el parlamentario abertzale se refirió a la sociedad vasca, donde, sostuvo, existe un «clamor que reclama que nos movamos», apostillando que la coalición a la que pertenece está dispuestos a trabajar en esa dirección. Asimismo, y tras considerar que «hace falta que se implique el Gobierno» español, se preguntó por qué se empeña este en poner obstáculos.

Tampoco dejó pasar la oportunidad de referirse a la reunión entre Urkullu y Rajoy, en la que dijo ver «un error de base», ya que el mandatario autonómico llevó «una propuesta que no es de país», sino la de su Gabinete y la de su partido, cuando debería haber sido «previamente consensuada» con los agentes vascos. Al respecto, y vista la «negativa permanente de Rajoy», consideró que «es hora de que Urkullu y el PNV busquen en Euskal Herria los acuerdos suficientes para desatascar el proceso». «Si sigue sin moverse, tenemos que hacer aquí nosotros el camino», concluyó.