En un encuentro en el que casi siempre ha remado contracorriente, ha sido el tremendo acierto en el tiro del conjunto serbio, reflejado en el 11 de 22 con el que acabaron en los triples, el que ha resultado decisivo.

Algunos de esos lanzamientos lejanos han llegado en los últimos minutos del choque, cuando la afición de Miribilla se las prometía felices al ponerse los suyos siete puntos arriba (73-66) a poco más de cuatro minutos para el final.

Dos canastas más que complicadas de anotar de Tadija Dragijevic y DeMarcus Nelson, que han colocado el 73-70 en el marcador, han sido claves para frenar la rabiosa reacción local y han supuesto el principio de un fin que ha estado amenazando durante los primeros 30 minutos.

El Bilbao Basket ha echado por la borda un impresionante último cuarto de Roger Grimau, que ha acumulado 12 de sus 15 puntos y 17 de sus 23 de valoración en el tramo final del encuentro.

Alex Mumbrú (18 y 16), Germán Gabriel (13 y 14) y Fran Pilepic (11) habían aguantado antes de un equipo que también ha contado con Dairis Bertans (11) para ayudar a Grimau en el último cuarto.

Pero entre un tercer cuarto poderoso del enorme Boban Marjanovic (11 y 17) y el impresionante acierto en los triples de Jaka Blazic (4/4, 20 puntos) y Dragicevic (4/5, 16) han acabado amargando la tarde a unos ‘hombres de negro’ que este año se despiden antes de lo que acostumbran de una competición en la que disfruta, la Eurocup.

Ha empezado mandando el Estrella Roja, que, después de una canasta inicial de Mumbrú, se ha adelantado 2-8 y 8-15 gracias a su acierto en los primeros triples lanzados.

No se ha quedado ahí la cosa y los serbios han llegado al final del primer cuarto 8 arriba (17-25) con el esloveno escolta esloveno Blazic (7 puntos) como principal protagonista. Mumbrú (8) ha aguantado en ese arranque de ‘los hombres de negro’.

Han cambiado las cosas en la segunda parte gracias al acierto de Pilepic, que con 9 puntos ha llevado a su equipo primero a adelantarse en el marcador (29-28) y después a volver equilibrar el choque tras un nuevo intento de escapada visitante (29-33).

Ha parecido encaminarse hacia la necesaria victoria por al menos 9 puntos de ventaja que necesitaba para seguir dependiendo de sí mismo el Bilbao Basket a vuelta de vestuarios (41-37), pero un severo 0-9 visitante ha avisado de que el tercer cuarto iba a estar bajo el gigantesco manto de Marjanovic (2,21 metros de estatura).

Ha aguantado el tipo como pudo ante el pívot serbio y ha llegado al último cuarto impulsado con opciones de ganar el partido apoyado en los puntos de Mumbrú y el espíritu de Grimau, que ha sido el que hizo soñar al Bilbao Arena.

Con la sencilla estrategia de penetrar y penetrar en cada ataque, sobre todo Grimau pero también Bertans, el Bilbao Basket ha dado la vuelta al partido y hasta ha acaricado los nueve puntos de ventaja que le servían para seguir dependiendo de sí mismo en la última jornada en Atenas ante el Panionios.

Pero entre varios tiros propios errados y un impresionante acierto rival, a los de Rafa Pueyo se le ha ido de las manos el choque en el carrusel final de tiros libres.