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Galdakao

Vecinos y vecinas de Galdakao denuncian el arresto y la incomunicación de Tomás Madina

Decenas de vecinos y vecinas de Galdakao han comparecido esta tarde ante los medios para denunciar la detención de Tomás Madina, quien lleva «una vida totalmente normalizada», participando en diferentes actividades culturales y sociales de la localidad.

Comparecencia de vecinos y vecinas de Galdakao contra la detención de Tomás Madina. (Marisol RAMÍREZ / ARGAZKI PRESS)
Comparecencia de vecinos y vecinas de Galdakao contra la detención de Tomás Madina. (Marisol RAMÍREZ / ARGAZKI PRESS)

Por ello se han preguntado «por qué tienen que presentarse en su casa a las tres de la madrugada docenas de encapuchados armados hasta los dientes, con pistolas y metralletas, y menos aún que apuntasen con ellas a sus dos hijos pequeños, después de echar la puerta a abajo. Cualquier institución podía haber citado a Tomás Madina pero han preferido llevar el miedo, las armas y los gritos hasta sus familiares e hijos».

Los convecinos de Madina han criticado los modos de la Guardia Civil en los registros y han mostrado su preocupación ante el hecho de que permanezca incomunicado. «¿Con que propósito? Si hay pruebas ¿para qué? Y si no las hay, ¿por qué se le detiene?», se han preguntado.  Según las últimas informaciones, Tomás Madina será trasladado este jueves por la ante un juez de la Audiencia Nacional española.

En la rueda de prensa se ha recordado que «se le acusa de algo que la propia ETA desmintió en su día, ya que un año antes a los hechos que se le imputan había decidido no llevar a cabo más acciones armadas. Todo suena cuando menos raro. ¿Por qué todo esto ahora, después de tantos años?», han insistido.

También han destacado que el arresto llega «justo dos días después de la cadena humana que unió Durango con Iruñea. ¿Qué mensajes quieren hacernos llegar? Nosotros sólo queremos decir que basta ya, parece que algunos vivían mejor en el pasado».

Posteriormente se ha celebrado una nueva manifestación por las calles de Galdakao en la que han tomado parte unas 600 personas.