El preso Masanori Kawasaki, de 68 años, ha sido ejecutado en Osaka (oeste de Japón) acusado de matar a sus dos nietas y a su cuñada en 2007, según ha informado el ministro japonés de Justicia, Sadakazu Tanigaki.
Japón ejecuta en la horca a los condenados, en el mayor de los secretos, sin aviso previo a los presos y sin testigos, y solo comunica estos casos a la opinión pública una vez que han sido ajusticiados.
La última ronda de ejecuciones tuvo lugar el pasado 12 de diciembre, cuando se ejecutó a dos presos en Tokio y en Osaka.
Euskal Herria
Los ingredientes para un «lawfare»
Kultura
Jon Sarasua: «Marko ideologiko jakina dago txapelketan, eta pobrea»
Euskal Herria
Lawfare: berria ez den jarduera bat, sei kasu paradigmatikotan
Mundua
«Oraingo honetan ez digute utzi, baina Gazara iritsiko gara blokeoa haustera»
Euskal Herria