El equipo de Mike Krzyzewski no ha decepcionado ante una poderosa Lituania, uno de los rivales que más le han plantado cara en este torneo, en el que el equipo estadounidense ha vuelto a marcar paso firme y continúa con el expediente inmaculado y completo de victorias.
Estados Unidos viajará a Madrid para el domingo intentar revalidar la medalla de oro que hace cuatro años se llevó en la final de Turquía, en la que barrió al equipo anfitrión.
En Madrid se decidirá el domingo qué selección se alza con la Copa del Mundo y ante Estados Unidos estará un rival europeo, Francia o Serbia, que este viernes disputarán la segunda semifinal del torneo.