El Tribunal Supremo español ha decidido confirmar la nulidad del despido colectivo de Coca-Cola por vulneración del derecho de huelga, lo que hace innecesario analizar el resto de las cuestiones planteadas.
La sala de lo Social ha considerado que durante la huelga convocada en contra del despido por cierre del centro de Fuenlabrada, la empresa sustituyó la producción dejada de realizar por la de otras embotelladoras del grupo, perjudicando así el adecuado desarrollo del periodo de consultas.
De esta forma, ha ratificado la sentencia de la Audiencia Nacional que declaró nulo el ERE de Coca-Cola, que afectó a 1.190 trabajadores y conllevó el cierre de las plantas de Fuenlabrada, Alicante, Asturias y Palma de Mallorca.
La sentencia es directamente ejecutiva y va acompañada de la condena al embotellador del pago de los salarios de tramitación.
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