El debate entre Araiz y Esparza ha arrancado con un primer bloque sobre «violencia y víctimas» y un segundo sobre situación económica y corrupción. La estrategia del candidato de UPN ha sido la de interrumpir constantemente, lo que ha convertido el debate en algo bastante chusco sin que la moderadora fuera capaz de poner orden. 

La primera parte ha comenzado con una intervención de Araiz, quien ha renovado la «apuesta por las vías pacíficas» y el rechazo a la violencia como método citando expresamente la ejercida por ETA. Ha realizado también autocrítica por haber tenido «insensibilidad» hacia algunas víctimas. Por su parte, Esparza ha replicado con una supuesta lista de dirigentes de la izquierda abertzale que votaron a favor de la «socialización del conflicto», algo que Araiz ha desmentido. Además, el abogado tafallés ha recordado que ha sido procesado por informaciones periodísticas similares, pero que siempre ha salido absuelto. Esparza ha asegurado también que es duro mirar en el coche «por si hay una bomba lapa». 

La segunda parte la ha arrancado Esparza cuya frase más destacada ha sido: «Aquí no ha habido despilfarro ninguno» y ha acusado a EH Bildu de «estar en contra de todo». Ha defendido proyectos como el Circuito de Los Arcos, argumentando que es rentable para Nafarroa. También el Navara Arena «cuando abra». Araiz, por su parte, ha replicado criticando estas infraestructuras, los peajes en la sombra, las dietas de CAN y Osasuna, entre otros. Además, ha acusado a UPN de vivir «en una burbuja de cristal que les incapacita para gobernar», por permanecer al margen de los damnificados por la crisis. 

El tercer bloque ha abordado las propuestas para el futuro. Ambos han discutido después de que Araiz hablara de necesidad «levantar alfombras». Esparza ha asegurado que para eso está Comptos. El debate más duro ha sido sobre la gestión en el Ayuntamiento de Agoitz, donde ahora gobierna Bildu tras heredar una gestión ruinosa por parte del propio Esparza. Araiz ha señalado que no hay una lista de UPN en el pueblo «por miedo al ridículo».

Araiz ha tenido el primer turno sobre «autogobierno y estatus de Navarra». El candidato ha asegurado: «No defendemos ni la anexión ni la integración» con la CAV, aunque ha renovado un sí a la articulación de un proyecto común, siempre que se respete la voluntad de los navarros. Esparza ha caído en los tópicos de «una Navarra de jota y zortziko en la que quepa Aralar y quepa Santa Ana». Ha sacado también una tira cómica sobre la ikurriña y se ha abierto un debate, siempre con interrupciones, sobre la Ley de Símbolos.