Tal y como habían adelantado el lunes por la noche, patronal y sindicatos alcanzaron ayer un principio de acuerdo para la firma del III Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva para el periodo 2015-2017 que, según el comunicado conjunto de patronal y sindicatos, se inscribe en la «senda de mejora de la economía española» y persigue dar respuesta desde la negociación colectiva al problema del paro.

El acuerdo, que llega con cinco meses de retraso, contempla una subida salarial de «hasta un 1% para 2015 y hasta el 1,5% para 2016», mientras que para 2017 se concretará cuando se conozca tanto el Producto Interior Bruto de 2016 como el cuadro macroeconómico del Gobierno para 2017.

El acuerdo prevé un mecanismo para vincular los salarios a inflaciones no previstas, «teniendo en cuenta que el sumatorio de los salarios de ambos años será mayor que la suma de las inflaciones de los mismos, en función proporcional de los salarios inicialmente pactados».

El acuerdo, que deberá ser ratificado por los órganos decisorios de cada organización firmante, también incluye instrumentos de flexibilidad y condiciones de trabajo, medidas sobre clasificación profesional y movilidad funcional, ordenación del tiempo de trabajo y ultraactividad.

Sindicatos vascos

El sindicato LAB, que pospuso una valoración más en profundidad hasta conocer «la letra pequeña» del acuerdo, quiso dejar claro que «no será una referencia en las negociaciones de aquí», al igual que ELA, sindicato que rechaza las medidas de flexibilidad que se incluyen en el texto y reclama que la negociación se lleve a cabo en Euskal Herria.

En un comunicado, el sindicato LAB, tras constatar que año tras año los salarios están perdiendo poder adquisitivo, denuncia que pese a ello los ataques a los salarios «se están agudizando», lo que está provocando «una incesante extensión de la pobreza y cada vez más desigualdades sociales, ya que la riqueza se reparte cada vez peor».

Ante esta situación, LAB reitera que seguirá defendiendo que las subidas de los salarios deben seguir vinculadas al IPC y afirma que «es hora de subir los salarios». Por ello, anuncia que el sindicato defenderá en las mesas de negociación subidas salariales por encima del IPC.

Asimismo, y con el fin de evitar que los trabajadores sean cada vez más pobres, defiende que ningún trabajador cobre por debajo de los 1.200 euros».

Cebek anhela el pacto y pide más flexibilidad a los sindicatos vascos

La Confederación Empresarial de Bizkaia Cebek aseguró ayer que ve con «envidia sana» el acuerdo entre CEOE, CCOO y UGT porque no solo recoge subidas salariales, sino que también aborda elementos de flexibilidad, y aseguró que en Euskal Herria no es posible que se alcancen incrementos salariales superiores a los que se han acordado en Madrid debido al «rechazo» de los sindicatos a hablar de estas cuestiones, lo que calificó como «la gran tragedia de la negociación colectiva vasca».

El presidente y el secretario general de Cebek, Iñaki Garcinuño y Francisco Javier Azpiazu, analizaron en una rueda de prensa el escenario económico de Bizkaia, un día antes de que la patronal vizcaína celebre su asamblea anual. Azpiazu subrayó que el principio de acuerdo alcanzado en Madrid no habla solo de salarios, sino que incluye «medidas para mejorar la competitividad» de las empresas. «En Euskadi es imposible incorporar la flexibilidad por el claro rechazo sindical», dijo.

Por otra parte, la patronal ha mejorado sus previsiones para este año, ya que prevé que la economía de Bizkaia crecerá este año un 2,6%, lo que permitirá crear ocho mil empleos. No obstante, constató que el crecimiento está desequilibrado, porque es «muy dependiente del sector Servicios», por lo que considera que hasta que no se recupere la industria, no habrá una recuperación plena. GARA